Las calles vacías de Caracas confirman que este viernes es un día en el que la gente ha preferido permanecer en sus casas bajo resguardo, a la espera de lo que pueda suceder en el país. Las nubes en el cielo son escasas, como también los negocios abiertos. La noche anterior, varios drones se elevaron sobre la base aérea La Carlota –el aeropuerto militar de Caracas–, y en una escena completamente orwelliana, dibujaron en el cielo oscuro el rostro de Nicolás Maduro y una paloma de la paz que sostiene una bandera tricolor. «¡Ganó la paz, ganó Venezuela!», escribían los drones con su show de luces.Frente a la sede del Ministerio de Transporte, a cien metros de donde reapareció María Corina Machado el jueves, se concentran numerosos trabajadores públicos que están uniformados con camisetas, gorras y banderas que dicen \'Yo juro con Maduro\'. Se suben a decenas de autobuses del ministerio y salen en caravana hacia Miraflores para celebrar la toma de posesión de Maduro, quien no tiene forma de demostrarle al mundo que ganó.«Esperemos que hoy suceda lo mejor», comenta el vigilante de un edificio residencial en el oeste de Caracas, refiriéndose a la juramentación de Edmundo González. La vigilancia se la turnan varios centinelas a lo largo de la semana, y a este le tocaba hacer una guardia de 24 horas el viernes, pero decidió venir la noche anterior y quedarse a dormir en previsión de un paro de transporte que le impidiese desplazarse hasta su trabajo. «Si todo sale bien, me voy a España para buscar a mi hijo y a mis nietos y traérmelos», manifiesta esperanzado.Noticia Relacionada estandar No Maduro: «Digan lo que quieran decir, pero esta toma de posesión no la pudieron impedir» P. Amigo Sigue en directo la toma de posesión de Nicolás Maduro como presidente de Venezuela hoy, con la última hora de las protestas en Caracas y lo que suceda con la oposición en el paísEn el oeste la militarización ha disminuido. Solo se deja ver alguna que otra camioneta sin matrícula del servicio de Inteligencia bolivariano. La mayoría de las fuerzas armadas están condensadas en el centro de la capital, donde Maduro se está poniendo la banda presidencial. Su juramentación es un golpe en el estado de ánimo para la mayoría de la población, que escogió a González para que sea él el que reciba el mandato presidencial. Pero es muy difícil arrebatarle la fe a los venezolanos en estos momentos. Una fe que fue renovada con fuerzas cuando Machado desafió al régimen al salir de la clandestinidad. Una montaña rusa de emociones continuó dando vueltas cuando llegaron las noticias de su detención y luego la de su liberación y que aún no termina de llegar a su punto final.Gente desanimada«María Corina demostró, una vez más, su liderazgo», comenta un vecino de la parroquia San Pedro, al sureste de la ciudad. «El jueves la gente se arriesgó y acudió a su llamado. Como dice ella: el miedo venció al miedo», aunque la convocatoria no fue tan concurrida como otras anteriores. «El pueblo aún está, de alguna manera, sometido, porque todavía no hay manifestaciones de parte de quienes esperamos, que es la fuerza militar. No hay acción y la gente teme y se cuida. No todos tienen el valor de salir. Pero, a pesar de eso, creo que el número en todo el país fue masivo, al contrario del llamado que hizo en paralelo Diosdado Cabello , que no dio resultado».Ante el interminable camino de la oposición, este vecino –que prefiere permanecer anónimo–, reconoce que hay mucha gente desesperada y desanimada «porque no ven los resultados». Pero hay que tener serenidad, afirma. «María Corina tiene un plan, una estrategia. Y lo ha demostrado con el tiempo. Ha sido una mujer coherente, pero sobre todo inteligente. La gente quiere saber cuál es el plan, sí, pero si se entera, también lo hará el régimen y eso sí garantiza el fracaso».El caraqueño se muestra convencido de que antes del 10 de enero no iba a suceder nada, pues «había que esperar a que se consumara el acto de usurpación en el que Maduro se cuelga nuevamente la banda presidencial. A partir de ahora se verá quienes se mantienen leales y quienes van a ir en contra de ese señor».Asimismo, confía en que González también se juramentará, aunque no sabe cómo ni dónde lo hará. «Lo importante es seguir apoyando a María Corina. El jueves sembró la expectativa, dejándonos entender que hay algo en ejecución. Conformémonos con eso. No nos queda a los venezolanos más que esperar. Y en el momento oportuno, y ella lo indicará, tomaremos las acciones que como población nos corresponde tomar. No pidamos más. Creo que las cosas van a suceder y van a suceder para bien. Lo que quedan son horas».