Las redes sociales están en la actualidad en todos los ámbitos de nuestra vida y, algunas de ellas, tienen un papel muy importante a la hora de conocer a gente nueva y poder tener una relación, ya sea, de una noche o más duradera. Si preguntamos a nuestro alrededor, tal vez muchas parejas de nuestro entorno se conocieron a través de las redes sociales o de alguna app de citas.
Pero esta facilidad que las redes permiten para contactar con otras personas puede llegar a poner en problemas a algunas parejas. Nadie está a salvo de que, aunque esté en una relación estable que esté funcionando bien, alguien aborde a su pareja a través de estas redes y comience a coquetear con él o ella.
La tentación ante una situación así puede llegar a ser importante porque a todos nos gusta sentir que le gustamos a alguien y, aunque no ocurra absolutamente nada en el mundo real y el coqueteo se quede solo en internet, ¿hasta qué punto podemos decir que ese comportamiento no es una infidelidad? Precisamente para nombrar una situación así es que algunos usuarios de TikTok comenzaron a utilizar el término soft cheating o micro cheating.
Como su propio nombre indica, se trata de una infidelidad de baja intensidad, en la que una persona que tiene pareja le da “me gusta”, comenta, flirtea, envía mensajes privados o sigue en las redes sociales a personas que le resultan atractivas. Aunque cada persona tiene sus razones respecto a por qué practica este tipo de infidelidad “suave”, en la mayoría de casos, según los expertos, lo que ocurre es que estas personas están necesitadas de valoración por parte de los demás.
Las consecuencias del soft cheating
El soft cheating puede ser un síntoma de muchas cosas, también de que la pareja no esté pasando por su mejor momento debido a que, quizás, la rutina se apoderó del vínculo o las relaciones sexuales son demasiado esporádicas. En definitiva, descubrir este tipo de comportamientos puede llegar a plantear un serio problema a la pareja, fundamentalmente porque genera muchas inseguridades.
Aunque se sepa perfectamente que no pasó nada en el mundo real, que nunca quedó en nada con otra persona o que ni siquiera se vieron, si estas inseguridades se disparan y no se sabe cómo hacerles frente entre los dos miembros de la pareja, pueden llevar con el tiempo a provocar el fin de la relación.
Cómo afrontar el soft cheating
Cada persona puede tener una noción diferente de lo que significa ser infiel. Para unos, solo se es infiel si se tienen relaciones sexuales con otra persona, para otros simplemente con que exista cierta intimidad ya se está cayendo en una infidelidad y otros consideran que una simple mirada puede ser motivo de alarma.
Lo mejor para desactivar los problemas que puede acarrear el soft cheating es comunicarse entre ambos integrantes para explicar qué es lo que considera cada uno como infidelidad y qué no. Si conseguimos ser completamente sinceros con este tema, es posible que un inocente coqueteo en las redes no afecte en absoluto a nuestra relación.
En todo caso, en el momento que sintamos que nuestra pareja está cruzando una línea roja que nos hace sentir inseguridad, deberíamos hablarlo para intentar llegar a un acuerdo al respecto y recuperar la normalidad y la confianza. TN.