El 14 de noviembre se celebra el Día Mundial de la Mascota Diabética, una oportunidad para que las personas aprendan a cuidar la salud de sus perros y gatos, brindándoles una mejor calidad de vida. Los animales también son susceptibles a esta enfermedad y la buena noticia es que, con un manejo adecuado, esta afección no tiene por qué interferir en la felicidad ni en la vitalidad de las mascotas. Se estima que alrededor de 1 de cada 500 perros y gatos desarrollan Diabetes Mellitus, aunque en la actualidad se cree que esta cifra es significativamente superior porque puede haber animales sin un diagnóstico declarado. Si bien, cualquier mascota puede desarrollarla, los perros y gatos de mediana edad a mayores son los más propensos, y ciertas razas tienen mayor riesgo.
Walter Comas, director de Animales de Compañía para MSD Salud Animal en Argentina, explica que “los signos más comunes de diabetes mellitus en mascotas incluyen un incremento en el consumo de agua y la frecuencia de la orina, un apetito exagerado acompañado de pérdida de peso, y, en los perros, la aparición de cataratas. En el caso de los gatos, puede observarse debilidad en las patas traseras, lo que afecta su movilidad”.
El diagnóstico se confirma mediante análisis de sangre, donde el veterinario evaluará la concentración de glucosa, así como otros aspectos específicos de la salud del animal. Este paso es esencial para empezar un tratamiento eficaz y mejorar la calidad de vida de la mascota.
Si bien esta condición se da por una insuficiencia de insulina, una hormona que regula el azúcar en sangre, lo positivo es que la diabetes es completamente manejable. “En Argentina existe un único tratamiento de insulinoterapia de uso veterinario aprobada por el SENASA, tanto para perros como gatos diabéticos, lo que facilita el tratamiento de la diabetes mellitus en estos animales por parte del profesional veterinario. Este tratamiento, más la adopción de buenos hábitos alimentarios y ejercicio moderado, permiten que tanto los perros y los gatos tengan un buen pronóstico” explica nuevamente Walter Comas.
En los últimos años, la tecnología se ha convertido en un aliado valioso para el control de la diabetes en mascotas. Hoy en día, existen aplicaciones móviles, tanto como para Android o iOS que permiten monitorear los niveles de glucosa, organizar recordatorios y registrar citas veterinarias. Estas herramientas digitales facilitan el seguimiento del tratamiento y permiten que los tutores se sientan más tranquilos al saber que tienen todo bajo control.
Además, a través de su portal web, y durante el Mes de la Mascota Diabética, MSD Salud Animal, invita a las familias de perros y gatos con diabetes a compartir sus testimonios para que más personas puedan informarse y generar conciencia.
Esta fecha recuerda que cuidar de la salud de las mascotas es una forma de garantizarles una vida llena de energía y bienestar, permitiendo que sigan compartiendo momentos inolvidables junto a sus familias.
Los perros de mediana edad a ancianos son los más susceptibles a desarrollar la diabetes. Los que se ven más afectados son las hembras enteras. Mientrás, que los gatos de todas las edades, sexos y razas son susceptibles a la diabetes mellitus felina. Sobretodo los gatos mayores tienen una mayor tendencia a padecer diabetes, los más comúnmente afectados son los machos castrados. También se ha reportado que los gatos Burmeses sufren una mayor incidencia de diabetes mellitus.
Se puede dar un mayor riesgo de desarrollar diabetes mellitus en las siguientes razas caninas: Keeshond, Caniche, Puli húngaro, Pinscher Miniatura, Samoyedo, Bobtail, Daschund, Springer Spaniel, Alaska Malamute, Schipperke, Schnauzer Miniatura, Spitz Finlandés, Chow chow, West Highland White Terrier, Beagle, Cairn Terrier, Dobermann y Golden Retriever, entre otros.