El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, advirtió sobre los inconvenientes que se pueden enfrentar si aumenta la escalada entre los hutíes de Yemen e Israel, y por ello pidió este jueves un alto el fuego a través de su portavoz.
«Los ataques aéreos israelíes contra el Aeropuerto Internacional de Saná, los puertos del mar Rojo y las centrales eléctricas en Yemen son especialmente alarmantes», dijo el vocero de Guterres en un comunicado.
Al parecer, los ataques aéreos causaron numerosas víctimas, entre ellas un miembro de la tripulación del Servicio Aéreo Humanitario de la ONU.
Según el comunicado, una delegación de alto nivel de la ONU, encabezada por el director general de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, se encontraba en el aeropuerto cuando se produjeron los ataques.
La delegación acababa de concluir unas conversaciones sobre la situación humanitaria en Yemen y la liberación del personal de la ONU y de otros organismos que permanece detenido.
Expresando su profunda preocupación por el riesgo de una nueva escalada en la región, el jefe de la ONU reiteró su llamamiento a todas las partes implicadas para que cesen todas las acciones militares y ejerzan la máxima moderación.
También advirtió que los ataques aéreos contra los puertos del mar Rojo y el aeropuerto de Saná plantean graves riesgos para las operaciones humanitarias, según el comunicado.
