El concejal del Frente Amplio por la Soberanía, Leonardo Caruana, presentó un proyecto de ordenanza para que en Rosario no se vendan armas de fuego a menores de 21 años. Además, instó a que la Municipalidad instrumente un sistema informático para seguir en tiempo real, a través de internet, los datos de quienes venden y compran estos artefactos.
La iniciativa fue impulsada por el concejal luego de que el gobierno de Javier Milei, mediante el Decreto 081/2024, bajara de 21 a 18 años la edad mínima permitida para poder adquirir y tener un arma. En caso de convertirse en ordenanza, la propuesta establece multas a las armerías que la incumplan.
En diálogo con Conclusión, Caruana observó: “No podemos ir en contra de una norma nacional, pero sí desalentar la tenencia de armas desde el nivel local, porque hay ordenanzas previas que exigen a las armerías registros y hay legislación que trata de limitar la circulación de armas legales”.
“A los 18 años -continuó el concejal- uno está más cerca de la adolescencia que de la adultez. Además, cuando aumentás la circulación de armas desde lo legal, nadie puede afirmar que no haya migraciones al circuito ilegal. Por otro lado, estamos hablando de una herramienta que sirve para eliminar al otro, es decir, estamos asociando a jóvenes con armas en nombre de la libertad, esto indigna, preocupa y entristece, deberíamos hablar de jóvenes y trabajo, cultura, amigos, encuentro, expectativas de estudio y laborales”.
“Hoy vivimos en un clima de época, sobre todo instalado nacionalmente, que trata de eliminar al que piensa diferente mediante un linchamiento en redes sociales o porque se habla de brazo armado. Por otro lado, estamos en una ciudad donde bajaron los indicadores claros de violencia armada, pero nadie puede decir que bajó el número de circulación de armas”, añadió Caruana.
Y se preguntó: “¿A qué modelo de sociedad vamos, con qué valores? ¿Vamos a dejar que cada uno resuelva los conflictos a través de las armas o con un Estado que cuide, acompañe y trabaje lo colectivo?”.
En cuanto a la viabilidad de aplicar este proyecto de ordenanza, el concejal lo comparó con las limitaciones que se aplicaron a la venta de pegamentos con tolueno -cuya comercialización está prohibida a menores-, pero reconoció: “No somos ingenuos, esto ataca o interviene en los circuitos legales, pero hay una gran circulación ilegal, que creemos que se corrige con otras cosas”.
¿Qué dice el proyecto de Caruana?
El proyecto propone que la Municipalidad de Rosario instrumente un sistema informático para verificar “en tiempo real y a través de internet” datos personales de quien compra y vende, información sobre las armas propiamente dichas, como marca, calibre y número de serie, y la cantidad de stock, tanto actual como inicial, que había en los comercios.
“Todas las armas de fuego pueden causar daños irreparables, por lo que es primordial reducir al máximo su circulación y reforzar controles para evitar el desvío en manos de individuos o grupos organizados que las utilizan para cometer delitos o actos violentos”, señala la iniciativa en sus considerandos.
Y añadió: “La prueba de que una mayor circulación de armas legales implica mayores facilidades para el crecimiento del mercado ilegal puede constarse en el caso de Brasil, donde a partir de la flexibilización de las condiciones de acceso para las personas, el resultado fue un crecimiento exponencial de la cantidad de armas en manos de la población, a través de redes de tráfico en las que se recluta a personas (en su mayoría pobres), se les gestiona la licencia para el uso legal, corriendo con los gastos de esos trámites y de la compra del armamento, y luego de denunciar un falso robo del arma, se las desvía hacia el mercado negro”.
