La Asociación de Profesionales y Técnicos del Hospital Garrahan (APyT) realizará una asamblea este miércoles 18 de diciembre a las 13:30 ante “un cierre del año 2024 con renuncias masivas debido a las políticas de vaciamiento del Estado implementadas por Javier Milei y Jorge Macri, y comenzando además 2025 con la paralización del jardín maternal Quiero Mimos”.
Desde la APyT recordaron que el presupuesto del Garrahan depende en un 80 % de los aportes del Estado nacional y el restante 20 % de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y señalaron: “En los últimos meses hubo 70 renuncias en el Garrahan, lo que resintió la atención en varias áreas”.
A través de un comunicado, la asociación agregó que “la situación es tan grave que en diciembre hubo una renuncia por día», mientras que «en los últimos 9 meses se fueron la misma cantidad de trabajadores que en los últimos 9 años», al ámbito privado o fuera del país.
En este contexto, reclamaron “un bono de emergencia para amortiguar la situación y evitar que la crisis se agrave aún más” (el Garrahan genera fondos propios ya que es parte de la ley Samic y le factura a obras sociales y prepagas ya que llegan allí muchos pacientes debido a la calidad en la atención de la alta complejidad en niños y adolescentes).
Además, ahora el jardín maternal «Quiero Mimos» del hospital “se enfrenta a una paralización debido a la falta de nombramientos de maestras para reemplazar a las que renunciaron o se jubilaron”.
Enseguida expusieron que esto “afecta directamente a las madres que trabajan en el hospital que tienen que reincorporarse en enero luego de la licencia por maternidad y están siendo avisadas de que no tienen vacante”.
“Niegan la vacante a lactantes de trabajadoras por falta de personal, organicémonos para defender nuestro derecho conquistado a trabajar y maternar”, señalaron en la convocatoria.
En el marco del actual plan de lucha, la APyT, junto a Autoconvocados Garrahan y a la Junta Interna de ATE, ya realizaron 10 jornadas de paro en reclamo de un salario inicial de 1.500.000 pesos igual a la canasta básica, recomposición salarial (ya que recibieron 100 % ante un período en el que hubo inflación de 240 %), fin del impuesto al salario y regularización de la orden de reutilizar material de un solo uso, denominado habitualmente “descartable”.
