La entidad rosarina que enarbola el legado del general José de San Martín, y que desde hace casi tres décadas realiza el cruce de los Andres a lomo de mula y a pie, realizó un último encuentro en la ciudad antes del iniciar la 28ª edición de la actividad, que se iniciará en Mendoza el 24 de enero.
“Este año retomamos los tres pasos, como se han hecho históricamente. Este año tenemos mucha fuerza y tenemos un paso que es innovador, que es el paso de El Portillo, que por primera vez lo hacemos a pie. Va una columna montado y una a pie, igual que Uspallata, que hace diez años que se hace así. Y Los Patos, en el que van solo montados”, dijo a Conclusión Andrés Haugh, presidente de la Asociación.
Este nuevo paso surgió como idea por “el espíritu que recibe la gente cuando va al cruce” que hace más de 200 años realizó San Martín para liberar Chile y Perú, en las batallas por la independencia de sudamérica del sometimiento de la corona española.
“Nadie que haga el cruce por primera vez no repite. Todos los que lo hacen lo repiten. Entonces tenemos gente que lo repite hace muchos años y nos pide hacer cosas nuevas”, explicó Haugh sobre la decisión de realizar en esta edición el cruce por El Portillo a pie.
El presidente de la entidad explicó que “es un paso más corto, pero con más dificultad, porque se sube a mucha altura y se baja muy abrupto. Hay piedra muy grande, cuesta mucho caminar en los senderos, a diferencia de Los Patos y Uspallata”.
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Debido a eso, “preparamos un grupo que ya tiene experiencia de haber hecho uno o dos veces el paso de Uspallata y así fue teníamos gente muy entusiasmada para hacerlo y armamos una expedición que va a ir por ahí”, explicó Haugh.
Víctor Rodríguez (h), miembro de la organización, precisó en diálogo con Conclusión que “este año estamos hablando de un equipo de 120 personas, entre logística y todo el personal que va a montar y caminar”. Destacó al “Ejército Argentino que nos va a estar dando el apoyo después de 28 años, que para nosotros es maravilloso. Son cinco columnas con tres pasos, de las cuales dos van caminando y tres van montados”.
«Espíritu de sacrificio»
“¿Cuál es el espíritu y la idea del cruce de los Andes?”, preguntó este medio a Haugh, quien explicó que “la asociación se funda con una idea, que es un proyecto pedagógico-histórico-cultural. El cruce de los Andes es la frutilla del postre. Esto nos sirve para poder comunicar el espíritu de sacrificio que tuvo el Ejército de los Andes, como es inculcado por el general San Martín, la estrategia que pudo planificar, que solamente se puede tomar dimensión cuando uno está ahí”.
“Uno puede saber mucho de la historia, pero cobra dimensión realmente cuando está en el lugar. Y esa vocación de ese espíritu de sacrificio es inquebrantable, por cómo convenció a 5.000 hombres a cruzar la Cordillera a pie, para pelear, dejar su vida en servicio de una causa”, abundó el sanmartiniano. Y agregó: “Eso para nosotros es muy motivador y creemos que es un legado que el general San Martín nos ha dejado, y que hoy tenemos que recuperar para poder transmitirlo a las generaciones futuras”.
Rodríguez, por su parte, dijo que “es un orgullo poder continuar emulando la gesta sanmartiniana, transmitiendo los valores, los conceptos que el general San Martín y sus hombres, ese pueblo cuyano que entregó todo en esta tierra en pos de la libertad de América, y creo que nuestra responsabilidad hoy, en el año 2024, es transmitirle a las próximas generaciones” ese legado.
También resaltó que “es muy importante que en familia podamos compartir. Han ido padres con sus hijos, la madre con su hijo, y eso hace que después se genere un vínculo de responsabilidad y de sentido patriótico hermoso”.
“Nosotros siempre decimos -continuó- que esto no es sólo una vuelta en burrito, esto es un mensaje, un proyecto pedagógico, histórico y cultural, que tenemos que transmitir a la mayor cantidad de gente en nuestro querido y bendito país”.
