La elección de Venezuela como sede del Sudamericano Sub 20 corre riesgo, luego de un boicot encabezado por el Gobierno argentino que llevó a la propia Conmebol a poner en duda la realización del campeonato.
Puntualmente, desde el ente rector del fútbol sudamericano se encuentran monitoreando la situación en el país del norte de Sudamérica, que atraviesa días de tensión política y este viernes 10 de enero tendrá la renovación del mandato del presidente Nicolás Maduro, mientras que el opositor Edmundo González Urrutia intentará realizar su propia asunción al considerar corruptas las elecciones.
Sobre esto, se encuentra también el conflicto desatado ante la denuncia de secuestro de un gendarme argentino, Nahuel Gallo, que motivó a una presentación internacional por parte de Cancillería, mientras que Maduro aseguró que el uniformado viajó a aquel país para asesinar a la vicepresidenta Delcy Rodríguez.
Este miércoles, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, dijo que la Selección Sub 20 no va a viajar al torneo por riesgo de que secuestren a los futbolistas.
“Argentina no va a mandar a chicos que nos puedan secuestrar. La Conmebol tendrá que pensarlo o tendrán que cambiar de sede”, señaló Bullrich en entrevista con medios venezolanos, para luego agregar: “¿Qué diferencia hay entre un gendarme y un jugador de fútbol? Lo pueden acusar de cualquier cosa, como si hubiéramos mandado a un policía disfrazado de futbolista. Es un riesgo inaceptable”.
El Sudamericano Sub 20 está previsto para disputarse en Venezuela desde el 23 de enero hasta el 16 de febrero, y clasificará a los equipos que participarán del Mundial Sub 20 en Chile entre el 27 de septiembre y el 19 de octubre de este año.
Desde la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) todavía no se emitieron declaraciones oficiales, mientras que el cuerpo técnico liderado por Diego Placente sigue con los preparativos del certamen con normalidad.