Por Alfredo Serrano Mancilla
La mejor forma de evaluar el grado de solidez de un Proceso de Cambio es analizar el cambio de los sentidos comunes de una sociedad. Y en Colombia esta transformación se está produciendo.
Según la última encuesta de CELAG DATA (presencial, en todo el país y 2.036 casos), la ciudadanía en su mayoría coincide con los ejes programáticos del Cambio que ha venido proponiendo su presidente, Gustavo Petro.
En lo laboral, casi dos tercios están a favor de una reforma que mejore las condiciones de trabajo. En pensiones, este mismo porcentaje está a favor de una reforma que garantice que todos los colombianos tengan derecho a una pensión de vejez, aunque no hayan podido hacer los aportes.
En salud, la mitad de la ciudadanía está de acuerdo con la decisión de que el Estado intervenga las EPS (el 40% estaría en contra). En relación al precio de las tarifas energéticas, casi el 70% considera que el Estado debe intervenir y regularlas. Y, por último, el 63% cree que es mejor reemplazar la explotación de petróleo y gas por energía renovables.
Petro está cerca de completar sus dos primeros años como presidente y sigue contando con un respaldo mayoritario a sus propuestas, a pesar de lo que pregonan ciertos medios de comunicación, que continúan disociados de lo que piensa la gente en la calle.
Esta es su mayor fortaleza para sostener ese nivel de aprobación notable sobre su gestión gubernamental (en general, en economía y en políticas sociales); y también en mantener una imagen positiva del 42% (que es de las más altas entre los presidentes latinoamericanos a estas alturas del mandato).
Este valor contrasta con la baja imagen positiva de todo el arco opositor. Alvaro Uribe posee una imagen favorable del 28% (61% de negativa); la periodista Vicky Dávila tiene una imagen positiva del 23% (47% de negativa); y las senadoras María Fernanda Cabal y Paloma Valencia no llegan ni al 15%. La única con más imagen positiva es la exalcaldesa de Bogotá, Claudia López, con un 31%, pero viene perdiendo fuelle desde hace tiempo.
La ciudadanía, cuando es consultada por cuál es la verdadera oposición al actual gobierno, sigue creyendo que es el uribismo (36%), seguido del poder económico (13%) y algunos medios de comunicación (12%).
Y, por último, es importante destacar otro aspecto crucial en relación a las formas de hacer oposición: la mayoría colombiana cree a Petro cuando éste afirma que hay sectores que están queriendo dar un golpe blando en su contra (52,7%).
En definitiva, la fortaleza del este Proceso de Cambio está en que sintoniza con demandas sustanciales de la sociedad.
* Doctor en Economía, Director CELAG