Por Tona Galvaliz
Víctor Frankl afirma que al hombre se le puede arrebatar todo en la vida, salvo una cosa; La última de las libertades humanas: la elección de la actitud personal, ante un conjunto de circunstancias, para decidir su propio camino.
En la vida nos tocan atravesar situaciones que no hemos elegido, circunstancias que nos ocasionan sufrimiento; pero debemos tener presente que somos libres, tenemos la capacidad de utilizar nuestro poder: libre albedrio; debemos hacerlo con responsabilidad, compromiso y propósito.
En esta nota quiero hablar desde los aportes del Dr. Víctor Frankl filósofo, Médico psiquiatra, neurólogo, psicólogo, filosofo, austríaco, sobreviviente de los horrores del holocausto judío.
Fue prisionero en Auschwitz y Dachau por más de tres años, vio morir a sus padres, esposa entre otras tantas muertes, superó estoicamente esas vivencias inhumanas, acompañó a otros prisioneros a que no se desanimen y encuentren una razón para vivir en esas tremendas circunstancias.
Mientras atravesaba los peores momentos de su vida, en pleno holocausto estableció las bases de su abordaje psicológico para posteriormente crear la “Logoterapia” fundamentada en el sentido de vida.
Creador de la “Logoterapia” tercera escuela Vienesa de Psicoterapia espiritual centrada en la persona.
En su libro tan conocido EL HOMBRE EN BUSCA DE SENTIDO narra sus vivencias y génesis de esta psicología humanista, fenomenológica, existencial.
Para Víctor Frankl el dolor espiritual, el sufrimiento, son síntomas de desesperanza.
Afirma que, si somos capaces de encontrar un propósito de valor en eso que nos hace sufrir, ¡Podremos superarlo!, descubriendo en ello nuevas razones, motivos y respuestas ante la vida, y dónde lo que originalmente causó dolor se convertirá en un desafío con sentido que fortalecerá enriqueciendo nuestras fuerzas.
Las respuestas sobre temas de la existencia siempre se encuentran adentro nuestro;
¡no afuera!, tampoco en cosas; el sentido de vida se siente interiormente y habla directamente a la consciencia.
A cada instante tenemos la oportunidad de tomar una decisión que determinará si somos presos de las circunstancias, cayendo en manos de lo que llamamos DESTINO o escuchar nuestra vos interior para elegir “la respuesta” actuando con en consecuencia con responsabilidad, explicando que responsabilidad es la respuesta con habilidad de cara a los hechos.
Condicionados tal vez, pero no determinados. Nada ni nadie puede definirte.
Es a partir de nuestra responsabilidad que nos vamos auto determinando.
La autodeterminación hace referencia a nuestra capacidad para tomar nuestras propias decisiones sobre nuestra identidad, nuestro presente, futuro, definiendo quienes somos y quienes deseamos ser, sin el control de personas o fuerzas externas.
Podemos sentirnos felices cuando somos consecuentes con nuestro sentido de vida, con nuestro para que vivir.
El sentido de vida puede ir cambiando dependiendo del crecimiento y madures que atraviesa la persona.
Suele suceder que, en los procesos de cambio, no encontremos o identifiquemos de primera mano el propio sentido, y esto ocasiona un profundo dolor, un hueco o vacío existencial donde duele el alma.
Al encontrar El sentido de vida, Se es feliz y, este que se construye mediante la atracción de los valores.
Somos atraídos por valores que nos mueven, guían y orientan nuestras acciones, conductas diarias que se tiñe por el sentido.
Por ejemplo, si los valores fueran el humo de un rico café que nos moviliza (la guía orientativa) a beber ese sabroso café (las acciones), la logoterapia a eso llama voluntad de sentido.
Para Víctor Frankl el sentido de vida, se sustenta en tres tipos de valores:
Valor Creativo, Valor Vivencial y Valor de Actitud.
-Valor Creativo es tu dar a la vida, es tu contribución ¿estas impactando positivamente en otros, en el planeta? ¿Como?
-Valor Vivencial es tu tomar de la vida, es tu vivencia, tu aprendizaje mediante tu experiencia, ¿De que estás nutriendo tu existencia?
-Valor de Actitud, es esa actitud que elijes, el cómo te paras y sales a la vida, a pesar de, respondiendo con sentido frente a las circunstancias dolorosas, trágicas.
¿Qué estas decidiendo que dependa de ti, de que te responsabilizas? ¿estas en víctima o líder de ti mismo?
¿Cuál es tu para qué vivir? ¿Qué valores te mueven? ¿Dónde está tu foco? ¿Dónde encuentras tu felicidad?
Nuestra vida son nuestras decisiones ¡La libertad es una decisión! y está en tus manos.
Te mando un beso inmenso TG
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