Por María Antonia Galvaliz
Para cada persona el éxito pueda significar algo diferente porque es un concepto subjetivo.
El éxito según el diccionario de lengua española hace referencia a una victoria, triunfo, gloria, fama, consecución, culminación, celebridad, renombre, notoriedad.
El éxito tiene un fuerte componente cultural, donde la cultura, la sociedad, el contexto en el que andamos inmersos definen lo que es exitoso y lo que no según ciertos parámetros.
Podríamos inferir respecto del concepto de éxito, que es posible observarlo y definirlo desde diferentes ámbitos.
Por ejemplo: en lo profesional o para los negocios se asocia a la riqueza, al logro, en lo afectivo se asocia al reconocimiento, a la fama, en alguna acción es exitosa como sinónimo de victoria o victoriosa o lo que es lo mismo, de triunfo o triunfal.
Para algunas personas el éxito puede significar satisfacer las necesidades personales, como alimentarse, vestirse, tener un hogar, para otras, el éxito puede significar tener posesiones materiales, como una casa, un automóvil, ropa y joyas etc.
El éxito desde un enfoque existencial se lo relaciona con el sentirse bien, con el bienestar, con la felicidad “al fin” y, este es el mayor de los éxitos.
Para alcanzar el éxito, es importante ser consciente de lo que se quiere alcanzar, poner toda la voluntad y recursos en acción, siempre se pueden aprender habilidades que ayuden a conseguirlo.
Para continuar cuando surgen los imponderables o cuando aparece el deseo de abandonar y rendirse, hay que reforzar manteniendo el foco en la visión y propósito.
Mí insignia de graduada de la segundaria tenía una leyenda que decía lo siguiente: “La perseverancia es un árbol de raíces amargas y frutos dulces” cuanta verdad y poder en esas simples palabras.
La perseverancia y dedicación es lo único que conduce hasta el final sin importar los obstáculos que debamos enfrentar.
Ya sabemos que no siempre es posible ver los resultados inmediatamente y por no ver los resultados inmediatamente hay quienes bajan los brazos y se rinden; punto determinante donde se pone a prueba la actitud y el sentido de valor de quien está persiguiendo un propósito que amerita esfuerzo.
Los esfuerzos intermitentes o esporádicos “no sirven”, es cómo un volver a comenzar cada vez.
Los verdaderos cambios sustentables orientados al logro no ocurren en un solo día, refieren a la acumulación de esfuerzos sostenidos en el día a día, o sea 24/7, siendo estos finamente pensados y diseñados a medida.
Como dijo alguna vez el filósofo, político, orador y escritor romano Séneca: “Ningún viento es favorable para quien no sabe a dónde va”, frase que hace referencia a la importancia de planificar y contar con un propósito claro para lograr el éxito.
Algunas recomendaciones para alcanzar el éxito:
Define tus objetivos y metas, pon cantidad, fecha.
Divide tus prioridades, jerarquiza.
Ten mentalidad de crecimiento.
Se productivo focalízate en la calidad de lo que haces.
Busca oportunidades, asesórate, busca mentores.
Visualiza tus objetivos y sé agradecido.
Construye relaciones sólidas con personas optimistas, superadoras que posean visión de crecimiento.
Gestiona favorablemente el tiempo y rutinas proactivas y saludables.
Establece una serie de creencias potenciadoras.
Pon él foco en aquello que deseas.
Haz más y quéjate menos y se amable y agradecido.
Sé una mejor versión cada día.
No te rindas.
Disfruta él proceso, sonríe más.
Repasa y refuerza las acciones que te acercan a la meta.
Corrige las acciones qué te alejan de la meta.
Reconoce y mide los avances, las etapas.
Celebra tus logros, aunque sean pequeños.
Me despido con una frase:
Sí puedes soñarlo, puedes lograrlo, la vida es demasiada corta para dejar cosas sin terminar, prohibido rendirse y ve por tus sueños.
Te mando un beso inmenso TG.
IG Tona Galvaliz. FB/LinkedIn. María Antonia Galvaliz. Counselor-Logoterapia-Biodecodificación- Coaching Ontológico y Sistémico- Speaker- PNL- Coaching WingWave- Escritora Columnista- Desarrollo Humano personal y organizacional.
