La investigación permitió orientar la pesquisa hacia una banda extraprovincial que se cree desde hace un tiempo viene cometiendo millonarios golpes en distintos puntos de la provincia.
Seis días después del millonario robo al empresario posadeño Daniel “Fonchi” Duarte, los investigadores policiales están tras los pasos de dos cordobeses y un correntino, que tendrían relación directa con el atraco ocurrido durante la madrugada del domingo pasado.
Fueron relacionados a partir de las pericias en los teléfonos celulares de uno de los detenidos que tiene la causa, es decir del cabo primero de policía Miguel T. (35), quien prestaba servicios en el Comando Radioeléctrico Uno y junto a Oscar Barrientos (gravemente herido a culatazos durante el atraco) brindaba seguridad en el edificio asaltado.
En el aparato del uniformado estaban agendados como Negro, Chango y Rengo, correspondiendo la característica numérica de los dos primeros a la localidad de San Francisco (Córdoba), en tanto que el tercero sería oriundo de la ciudad de Paso de los Libres, de acuerdo al mismo registro.
El empresario damnificado confirmó que los malvivientes se alzaron con más de diez millones de pesos de las dos cajas fuertes ubicadas en el segundo y tercer piso del edificio de avenida Rademacher casi Ameghino.
Fuentes ligadas a la investigación señalaron que los datos obtenidos fueron contundentes y dejaron al descubierto una serie de mensajes enviados entre los sospechosos varias semanas antes del atraco e incluso horas después de presuntamente haber cometido el hecho.
En el aparato dieron con mensajes comunes y de WhatsApp donde planificaban el robo, el modus operandi y hasta cómo iban a repartir el dinero. También, luego del atraco, aparecieron textos de alerta a los demás miembros de la banda (se presume que fueron cinco) indicando los operativos policiales para capturarlos, aunque se presume que a esa hora los delincuentes ya estaban fuera de la provincia.
La investigación que lleva adelante la División de Delitos Complejos de la Policía y la Secretaria de Apoyo para Delitos Complejos (Saic), permitió orientar la pesquisa hacia una banda extraprovincial que se cree desde hace un tiempo viene cometiendo millonarios golpes en distintos puntos de esta provincia.
Se manejarían con contactos locales que les proporcionan logística y el suficiente apoyo para concretar los golpes con precisión, tal el caso del asalto al shopping posadeño donde llegaron a la caja fuerte tras reducir al sereno y a una joyería céntrica, en septiembre del año pasado, donde por medio de un boquete en el techo los delincuentes se alzaron con más de un millón de pesos en joyas. Ninguno de los casos tiene sospechosos detenidos y los botines jamás se recuperó.