Sucedió durante un corte de luz. Delincuentes utilizaron un arma de fuego para cometer el hecho. Se llevaron medicamentos y dinero.
A la Redacción de época llegaron vecinos de la localidad de San Luis del Palmar, distante 30 kilómetros de Capital.
Contaron acerca de varios hechos que sucedieron y que, por temor, los damnificados en su mayoría no hicieron denuncia. El más grave ocurrió el fin de semana. Una mujer fue asaltada por un delincuente que la maniató y golpeó. Se llevó medicamentos y dinero de una farmacia.
Un vecino (quien pidió reserva de su identidad por temor a represalias, porque asegura que en el “pueblo se conocen todos”) comentó que durante el fin de semana dos hechos sucedieron en el cual uno terminó con una mujer encerrada en el baño de un local.
“Ocurrió durante la noche del sábado, en momentos que la empleada estaba en la farmacia ‘13 de julio’. Llegaron dos personas para comprar medicamentos. Ella les hizo pasar, porque tenía cerrado con rejas y fue ahí cuando sucedió el hecho. El hombre la llevó al baño, la maniató, le propinó algunos golpes de puño y la dejó encerrada en el lugar. Mientras la otra persona sería quien se llevó remedios y dinero en efectivo”, dijo con preocupación el sanluiseño.
Respecto al hecho, época consultó a la Policía. Desde la fuerza aseguraron que la comisaría local inició de oficio al tomar conocimiento.
“Ese día hubo corte de luz, por lo tanto no se pudo tener el registro de las cámaras de seguridad del lugar. De la farmacia se llevaron cerca de 3.500 pesos, según la declaración de uno de los empleados. Hubo una persona que habría estado armada y fue quien interceptó a la mujer”, dijo una voz oficial a este medio.
Mario, otro vecino, por su parte explicó que la farmacia se ubica sobre calle Rivadavia al 800, a pocos metros del edificio municipal. Y próximo a la parada de minibuses que llevan a familiares a visitar a los internos del penal.
“En la cuadra siempre se registran robos”, agregó, a la vez que solicitó que se realicen con mayor frecuencia los patrullajes.
Otro de los hechos que ocurrió en la localidad fue en un local de ropas. “El dueño del comercio no quiso hacer denuncia porque los delincuentes serían conocidos”, explicó el vecino.
“Dos personas violentaron la puerta de acceso al local y antes que llegara la Policía huyeron. Pero dejaron en bolsas cerca de la puerta la mercadería que iban a llevarse. Una pareja pasó por el lugar y fue quien avisó a la Policía, por eso no se pudo consumar el hecho”, explicó. Otro intento de robo ocurrió en una vivienda ubicada cerca del acceso a la localidad sobre Ruta 5. La propietaria llegó en el momento que dos “jovencitos” intentaron ingresar al inmueble a través de una ventana. “La mujer vive sola y tiene miedo. Ante esta situación no quiso avisar a la Policía”, contó Mario.
“Son muchos los robos, necesitamos ayuda al menos con la presencia de la Policía”, agregó.
Trabajo de herreros
Se sabe que en la localidad los herreros tienen mucho trabajo, “son constantes los pedidos de rejas para las casas”, dijo otro vecino a este medio, quien agregó: “Tenemos que vivir nosotros encerrados y los delincuentes libres”.
Hay presencia de uniformados, aseguran, pero a veces “los delincuentes actúan más rápido que la Policía”, cerraron.