A las 10 habrá una concentración en la plaza La Cruz de familiares y amigos del joven ahogado en el Paraná tras una persecución de policías. Hay 11 efectivos imputados, la movilización será hasta la Jefatura y el ministerio de Seguridad provincial.
“Abandono de persona seguido de muerte” es uno de los delitos más graves que se imputan a los uniformados provinciales.
El hecho ocurrió en las primeras horas del lunes 8 de noviembre, en la madrugada de ese día el joven de 18 años junto a un menor de 16, corrían de policías en la costanera sur y Lautaro Rosé se arrojó a las aguas del Paraná para evitar ser arrestado.
Los policías no dieron aviso ni ayudaron al joven a salir del agua. La querella que representa a la familia de la víctima, pedirá que el chico de 16 años –único testigo del hecho- sea incluido en el Programa de Testigos Protegidos.
La querella también pidió que la Justicia provincial no investigue el caso, por ahora pedido no hecho a su lugar, mientras se avanza en la recolección de pruebas. Si las autoridades de la fiscalía N° 6 así lo requieran, podrán pedir la intervención de peritos y técnicos judiciales nacionales.
