Efectivos de la comisaría Decimonovena fueron a detenerlo por un arrebato del día anterior. Con ayuda de familiares saltó a la vivienda de al lado. Igual no tuvo escapatoria.
Un joven de alias “Maxi” trató de evitar su detención escondiéndose en la casa de un vecino, cuando la Policía comenzaba el allanamiento a su domicilio en el populoso barrio Colombia Granaderos de la capital provincial.
El delincuente cometió un arrebato violento el día anterior, las víctimas lo persiguieron y supieron de quién se trataba, gracias a “algunos datos” que vecinos de la zona aportaron sin quedar expuestos.
En la intersección de avenidas Las Heras y Santa Rosa la mujer transitaba en forma ocasional acompañada de su marido. El sábado, un malhechor sorprendió a la víctima desde atrás, la empujó y sustrajo un teléfono celular, precisaron a época fuentes oficiales.
Ambas personas corrieron al delincuente hasta un pasaje cercano, conocido en ese barrio como “El Tronquito”. Allí lo perdieron de vista.
Sin embargo, algunos habitantes de los alrededores comentaron a la damnificada quién era el ladrón. “Fue Maxi”, le dijeron e indicaron la vivienda que habita junto a su familia.
Con esa información asentaron la denuncia en la comisaría seccional Decimonovena, cuyas autoridades iniciaron la causa y solicitaron al Juzgado de Instrucción Número 5 una orden de allanamiento. Esa medida fue librada el día después.
Parientes del joven buscado entorpecieron el procedimiento en el que participó la División de Infantería. Mientras su familia impedía el ingreso, “Maxi” cruzó a una vivienda vecina.
Parecía que saldría otra vez con la suya, pero el dueño de la propiedad no quiso tener problemas legales y sacó al intruso a la calle.
Una vez detenido condujeron al joven arrebatador a la comisaría para quedar imputado en la causa de robo.
