La Policía recuperó la bicicleta robada a un joven herido a cuchillazos y golpes por integrantes de una patota del capitalino barrio Irupé.
Efectivos de la Dirección de Investigación Criminal (DIC) estaban abocados a la búsqueda del vehículo cuando el sábado, a la tarde, divisaron a un delincuente trasladándola sobre avenida Cartagena.
Al darse cuenta de la presencia policial, el sospechoso arrojó el vehículo al piso y corrió hacia una zona de pasillos en el que fue perdido de vista.
Durante el secuestro preventivo del rodado constataron que era la bicicleta, marca Nordic, rodado 29, que tres malvivientes sustrajeron el viernes a la noche.
Aquel día, alrededor de las 21:30, a costa de patadas y uso de un arma blanca quitaron el vehículo a Marcos M., de 29 años, en la esquina de Cartagena y calle Pirovano.
"Por la adrenalina del momento no me di cuenta que estaba lastimado" dijo la víctima, quien volvía a su casa.
Uno de los ladrones provocó la caída de Marcos, otro empezó a darle patadas y el tercero, portando el arma blanca, lo lastimó de cortes en el brazo derecho.
La patota huyó con la bicicleta rumbo a un sector oscuro de la barriada situada en la zona Sureste de la ciudad.
"Cuando intento darles pelea se estaban metiendo hacia el barrio.
Entre que uno se pone a pelearme, otro me golpea y respondo al golpe; me amaga con un cuchillo y escucho que otro dice tirale un puntazo", indicó Marcos.
Uno de los asaltantes estaría identificado y debido a la gravedad del ilícito la Policía continúa la investigación.
Datos extraoficiales sitúan a los malhechores como "vecinos del barrio Irupé".
El día de la sustracción de la bicicleta, los tres criminales fueron vistos desde rato antes en la esquina de Cartagena y Pirovano "donde siempre se juntan".
Luego de consumar el robo ofrecieron la bicicleta a la venta. Pero como el caso fue viralizado al poco tiempo nadie quería comprarla sabiendo cómo la habían obtenido.