Los ladrones entraron rompiendo rejas y puertas a un local donde funciona una agencia de quiniela junto a una terminal de cobros de servicios. Anularon alarmas y luego arrancaron el cofre metálico asegurado con bulones al piso. Habrían escapado en una camioneta.
Varios ladrones sustrajeron una caja fuerte de 650 kilos cargada con alrededor de 750 mil pesos y asegurada con bulones al piso de un local comercial de la ciudad correntina de Saladas, al cual ingresaron forzando rejas y puertas.
Los malvivientes, mediante un plan bien elaborado, tuvieron la capacidad de desactivar un sistema de alarmas y de cámaras de seguridad antes de escapar presuntamente en una camioneta.
El ilícito se produjo a 50 metros de dos entidades bancarias, a una cuadra de la plaza central y a una cuadra y media de la comisaría de la localidad distante 100 kilómetros al Sur de la capital provincial, donde en las últimas semanas ocurrieron numerosos delitos contra la propiedad.
De acuerdo a información conocida por diario época, el ilícito se produjo durante la madrugada en un negocio donde funciona una agencia de quiniela y una terminal de cobros de servicios, situada en calle Alvear, entre 25 de Mayo y Bartolomé Mitre.
Con pleno conocimiento de las instalaciones, el grupo de malvivientes (se cree que serían al menos cuatro) forzaron las rejas de seguridad de una puerta trasera. Después rompieron la cerradura de una segunda abertura y una vez en el interior causaron roturas en una tercera puerta.
Con todo el tiempo a disposición cortaron los cables de telefonía y desactivaron las alarmas, al punto tal de arrancar de cuajo una sirena. También cortaron los cables del sistema de circuito cerrado de cámaras de seguridad y, sin dejar nada librado al azar, llegaron hasta la caja de memoria (DVR) donde quedan guardadas las imágenes, la cual se llevaron.
Presuntamente provistos de barretas, martillos y otras herramientas desprendieron el cofre de hierro macizo asegurado con bulones tanto al piso como a la pared de una oficina.
Aún cuando su peso oscilaría en unos 650 kilos se las ingeniaron para salir de ese recinto, pasar por el salón de ventas y atención al público, ganar la calle y seguramente cargarla a un vehículo que, dada las características de lo que llevaban, sería una camioneta.
En la caja fuerte estaba el dinero producto de la recaudación anterior a los días de Semana Santa, tanto por el cobro de facturas de servicios (energía eléctrica, telefonía, etc.) como de la agencia de quiniela y efectivo perteneciente a una firma de servicios forestales.
La Policía inició la pesquisa, con pericias e inspección ocular en las dependencias del comercio afectado. Sin embargo, no hay datos de los delincuentes.