"Vamos a seguir apelando y pidiendo justicia aunque sea en tribunales internacionales”. La familiar de una de las víctimas por crímenes de lesa humanidad en Gobernador Virasoro, Noemí Acuña, opinó sobre los fallos adversos que dilatan la causa en la que se encuentran implicados empresarios de la yerba mate y afirmó que "estas medidas, sin duda, apuntan a la existencia de un círculo de protección e impunidad".
La causa por crímenes de lesa humanidad en Gobernador Virasoro aborda las desapariciones de Neris Pérez y Marcelo Peralta, obreros de la yerba mate, y agremiados a la Federación Argentina de Trabajadores Rurales así como al Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación, secuestrados en Las Marías en junio de 1977.
Por ambas desapariciones fue implicado el ex gobernador de facto Adolfo Navajas Artaza y se encuentran imputados; Juan Carlos Sacco y Torres Queirel, quien recientemente pidió autorización para viajar a Suecia.
Noemí Acuña es hija de Marcelo Acuña fundador y secretario general del Sindicato de Industria de Alimentación de Virasoro y promotor de la creación del Sindicato de trabajadores Rurales. Comentó desde radio UNNE que "la causa se inició en tiempos de democracia cuando mi padre hace la denuncia en los tribunales de Paso de los Libres", agregando que "la causa vino con muchas piedras en el camino desde que iniciamos, muchos jueces se excusaron para no involucrarse en la causa por tener relación con los empresarios de la empresa Las Marías".
"En un principio se sobreseyó a Narvajas Artaza antes de llamar a indagatoria y quedaron dos militares involucrados", recordó Acuña y pese al pedido de las familias "también Sacco fue apartado y ahora se supo que Torres Queirel pidió a la justicia una autorización para ausentarse del país por sesenta (60) días para asistir al bautismo de un nieto en Suecia".
Noemí expresó sentir “un gran dolor y preocupación" pues se observa que "todos los pasos legales apuntan a cerrar la causa".
A pesar de ello resaltó que “no bajaremos los brazos. Estas medidas, sin duda, apuntan a la existencia de un círculo de protección e impunidad. Vamos a seguir apelando y pidiendo justicia aunque sea en tribunales internacionales”.
