De cara al debate iniciado en Diputados, el gobierno trata de edificar respaldo político para el proyecto de Presupuesto y descuentan la suma de una decena de gobernadores firmando la corrección al consenso fiscal.
En busca de la recuperación de la confianza perdida del mercado, el gobierno avanzó en el apoyo político al Presupuesto 2019 que ya se debate el Congreso: este lunes firmaron la adenda -corrección- al consenso fiscal tres gobernadores -Horacio Rodríguez Larreta, el misionero Hugo Passalacqua y el correntino Gustavo Valdés- y espera contar en los próximos días contar con la rúbrica de unos 20 mandatarios provinciales.
Se trata del Consenso Fiscal 2018, que modifica el acordado en noviembre pasado entre las partes, y permitirá compensar a las provincias por la quita del Fondo Sojero y las transferencias de subsidios nacionales a los distritos en el marco del ajuste que lleva adelante el gobierno. De hecho, el presupuesto presentado ayer en Diputados prevé un ahorro fiscal de $400 mil millones, de los cuales $100 mil millones les corresponderán a los estados provinciales. Todo para llegar al mentado equilibrio fiscal que pactó el Ejecutivo con el FMI para lograr un nuevo acuerdo.
Con las enmiendas planteadas, las provincias obtendrán ventajas por los reintegros de IVA, la derogación de las exenciones a la deducción del impuesto a las Ganancias, la suspensión por 2 años del compromiso asumido en el pacto fiscal de no incrementar Bienes Personales (se grabarían bienes en el exterior), suspensión en la rebaja del impuesto a los Sellos y la flexibilización de la ley de responsabilidad fiscal “con la posibilidad de incrementar el límite de gasto público corriente primario neto para el ejercicio fiscal 2019”.
Tal como se consensuó en el citado documento, la Ciudad y la Provincia deberán hacerse cargo de Edenor y Edesur, y los subsidios a los usuarios de Aysa; la empresa de aguas y cloacas quedará en manos de Nación por los créditos externos que pidió para hacer obras.
Como se modifican tributos, una vez que logre el apoyo mayoritario a la adenda -en el oficialismo esperan contar el respaldo de entre 18 y 20 provincias-, el Ejecutivo enviará un proyecto al Senado para que sea debatido en paralelo a la ley de leyes.
En este marco, ayer pasaron por el Ministerio del Interior otros tres gobernadores. En la cartera conducida por Rogelio Frigerio ya descuentan la rúbrica de diez mandatarios.
El viernes pasado el salteño Juan Manuel Urtubey fue el primero en formalizar el apoyo y luego fue el turno del chaqueño Domingo Peppo y el jujeño Gerardo Morales.
Ayer, en tanto, visitaron Casa Rosada el misionero Passalacqua -sin voz por una afección en las cuerdas vocales-, el alcalde porteño y el radical correntino Valdés. Hoy, según lo informado por fuentes oficiales, será el turno de otros cuatro gobernadores opositores: el sanjuanino Sergio Uñac, el cordobés Juan Schiaretti, el entrerriano Gustavo Bordet y el neuquino Omar Gutiérrez.
Aunque apuestan a un respaldo de la mayoría de los distritos, en el oficialismo reconocen que La Pampa y San Luis no apoyarán el acuerdo de hecho no firmaron el consenso 2017- y otros distritos, como Santa Fe, esta semana se abocarán a estudiar la reforma planteada.
Ayer el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, presentó el proyecto de Presupuesto 2019 en la Cámara de Diputados. El texto prevé una caída de la actividad para el año próximo del 0,5% arrastrada por el derrumbe de 2018 del -2,4%. Sí llamó la atención la proyección sobre el dólar a $40,10, es decir, apenas más bajo que la cotización actual y por ello quizás estiman una inflación "promedio" del 23%. Si se cumpliera ese pronóstico, el IPC el año entrante se reduciría unos 20 puntos ya que el proyecto reconoce una inflación para este año del 42%.
