Preside ELI, uno de los partidos más importantes de la alianza ECO, detrás del radicalismo. Es además uno de los fundadores del viejo Frente de Todos. Por eso, dice que llegó la hora de hacer ciertas revisiones. En esta nota, “Perucho” dispuesto a no callarse nada.
Rompió el silencio. Fue en la grabación del programa Final Abierto, que se emitirá completo esta noche a las 21.30 por las plataformas del diario El Litoral. El presidente de la Cámara de Diputados, Pedro Cassani, quien además está al frente del partido Encuentro Liberal, blanqueó su voluntad de ser candidato a gobernador, pero no solo eso. Envió varios otros “mensajes”. Dijo que “quizás esta sea una buena oportunidad para que la alianza ECO refresque su oferta electoral”, y que eso de “refrescar ECO no es solo una opinión” suya. Espera que no haya quiebres, dijo, pero no lo aseguró. Además dejó traslucir que desconfía de las encuestas, que “la de ECO es una buena gestión, pero tenemos que hacer una propuesta hacía adelante”, pues “tenemos una visión distinta de algunas acciones del Gobierno”. Para el final no se guardó nada: “No descarto la creación de un tercer espacio”, pues “me hubiera gustado tener más posibilidades de diálogo”. Algo más: “Si el radicalismo sigue gobernando en Goya, algo no estamos haciendo bien”, expresó en clave de chicana. Aun así, dice que no está desafiando la candidatura de Gustavo Valdés, pero que le parece obvio hacer un reclamo público de este calibre. “Siempre hay una primera vez”, ironizó.
—¿Cómo ve la alianza de cara a lo que viene?
—Nosotros vemos que tal vez sea una buena oportunidad para que ECO refresque un poco su oferta electoral.
—¿Qué quiere decir con eso?
—Creo que otros pueden llevar adelante una buena gestión en la Gobernación, me parece algo razonable plantear esto.
—¿Quiere ser candidato a gobernador?
—¿Por qué no? ECO está conformado por alrededor de 23 o 24 partidos políticos, pero hace 20 años que se gobierna con un representante de un solo signo político. Quizás llegó el momento de dar una impronta distinta, con el mismo modelo de gestión, pero con otra impronta y prioridades. (...) Porque ECO es más que un solo partido político o que el radicalismo. Es una conjunción de las fuerzas políticas y me parece que nadie debería de enojarse por esto.
—¿Está planteando una alternancia?
—No solamente debemos verlo en el aspecto de los candidatos, sino me parece el momento propicio para que los partidos políticos nos pongamos a trabajar en equipo acerca de cuál va a ser la oferta electoral para los próximos cuatro años.
—¿Considera que ese debate no está sucediendo actualmente?
—Y, hasta ahora, no. De hecho, el año pasado como presidente de ELI he convocado a una reunión de los partidos políticos que tienen representación legislativa que son de ECO y la verdad es que fue una reunión para el malestar de muchos.
—¿Usted está enojado por algo?
—No, para nada. Soy uno de los dirigentes políticos que está desde la construcción de este espacio, desde el 2001, y nunca me he ido.
—¿Nota que no lo respetan?
—No, no es eso. Creo que no estamos acertando el procedimiento.
—¿Esto puede llevar a un quiebre?
—Espero que no. Espero que la sensatez llegue a buen puerto.
—¿Pero no asegura que no se pueda dar?
—Yo espero que no. Espero que podamos comprender lo que estoy diciendo, que es casi elemental y una obviedad absoluta.
—¿Plantea un escenario de diálogo o rediseñar la alianza?
—Solo digo que cuando va terminando una gestión, lo que corresponde es hacer balances y dejar de mirar un poco las encuestas. Sobre todo teniendo en cuenta que las encuestas no la pegaron en los últimos años en Argentina.
—¿Desconfía de las encuestas?
—No. Yo no confío ni dejo de confiar. Pero si no hay propuestas, no podés preguntar a la sociedad a quién va a votar. Si nadie hizo una propuesta todavía, que yo sepa.
—¿Hace cuánto no habla con el Gobernador?
—A fin de año hablé con él.
—¿Cómo está la relación actualmente?
—Bien. Porque lo que estoy diciendo también lo digo ante la dirigencia.
—¿Le trasmitió sus aspiraciones a Gustavo Valdés?
—Hemos dialogado en alguna oportunidad sobre estos temas. Por eso digo, nadie se tiene que enojar.
—¿Pero sabe que estas declaraciones pueden generar debate, porque no eran conocidas?
—Yo para acompañar a ECO me fui del partido en el que milité (el Partido Liberal) y con otros dirigentes formamos un nuevo partido para seguir acompañando este espacio. En aquel momento el partido que militaba dijo ‘nos vamos de ECO’, y tuve la posibilidad de irme con el partido, pero creía que la continuidad en ese momento era sobre la base de ECO. Nos fuimos del PL y generamos un nuevo partido para seguir acompañando. Ahora, yo tengo posturas diferentes al Gobierno, porque en la alianza no somos todos del mismo partido.
—¿Puede haber un tercer espacio en Corrientes?
—No, pero no se puede decir que no en esto.
—¿No lo descarta?
—No lo descarto, porque me parece que esto será la resultante de un tiempo.
—¿Se está reuniendo con otros partidos?
—Hablamos con todos.
—¿Está desafiando la candidatura de Valdés?
—¿Pero por qué el candidato no puede ser de otro partido?
—¿Por qué no puede ser Cassani?
—¿Y por qué no? U otro.
-¿Cree que se podría llegar a un consenso?
—Sí. Espero que sí, porque nos conocemos desde hace mucho tiempo. El que me conoce sabe que no me pongo el uniforme de una cosa y hago otra. Trato de ser una persona coherente y los que me conocen lo saben.
—¿Aspira a ser gobernador, entonces?
—Sí, aspiró a ser gobernador porque me siento en condiciones, pero no es una obsesión que tengo. Lo converso con todas las fuerzas políticas y con otros sectores que seguramente van a proponer candidatos. Lo malo sería no tener candidatos.
—¿En que no coincide con Valdés?
—Hay cuestiones que siguen sin resolverse y me parece que debemos resolver profundizando el diálogo.
—¿Esta es la tercera vez que reclama el diálogo?
—Sí, porque me parece que es lo que falta.
—¿Habla con Ricardo Colombi?
—Sí, habló con él.
—¿Le comunicó estos temas?
—Sí. Escuchó con atención, pero no le pedí definiciones, porque las definiciones son del partido y no de los presidentes. Uno conversa con los presidentes de los partidos, pero las decisiones son institucionales. A nadie le sorprende esto, es lo natural.
(...) Ahora, si yo me acostumbro, por ejemplo, a que en Goya el radicalismo que gobierna hace 20 años siga, algo no estoy haciendo bien.
—¿Va a reclamar la intendencia de Goya?
—Hemos dialogado y se lo dije a la dirigencia. Después de 20 años de acompañar, es una posibilidad. Hemos estado preparándonos en temas municipales. Me parece razonable y no debería primar el enojo.
—¿Pero puede generar controversias?
—Bueno, siempre hay una primera vez, en algún momento se tiene que dar porque me parece que lo natural debería ser lo que estoy planteando. Si nosotros acompañamos por 20 años, por qué esta vuelta no podemos oxigenar por otro lado con fulano y dentro de cuatro años vemos cuáles de los jóvenes que está empujando puede aparecer. Si no me parece que la lealtad es solamente cuando se acompaña a uno.
—¿Si se define por él, acompañaría a Valdés en la fórmula?
—Quizás me acompañe él a mí. Es una posibilidad. No sé si parece tan rara mi posición o si es ilógica.