La falta de oportunidades, la imprevisibilidad y la situación económica y social del país son los factores principales.
Si bien la Dirección Nacional de Migraciones a nivel local no posee datos precisos, sí los tienen algunas ONGs como la Fundación Migrantes y Refugiados sin Fronteras, desde donde aseguran que el índice de consultas con intenciones de emigrar “están casi a los mismos índices que en 2001 ó 2002”.
También hay gran demanda para obtener la ciudadanía con la idea de emigrar en el Istituto Nazionale Assistenza Sociale (Inas), desde donde aseguraron que la nacionalidad italiana opera como salvoconducto para después partir hacia otros destinos como España, Nueva Zelanda, Australia y Londres.