ace 2 años el mundo del espectáculo argentino perdía otro gran valor y la lista a veces se hace interminable. Sin dudas fue (bah, es y siempre lo será) uno de los personajes más queridos que nos ha dejado el teatro, la TV y el cine.
Si no lo sacaste por la foto, se trata de Daniel Rabinovich, uno de los integrantes de primera hora de Les Luthiers que, hoy, como todos los que alguna vez nos descocimos con sus caras, extraña su presencia aunque no lo digan ni lo hagan notar.
Rabinovich nació en Buenos Aires, el 18 de noviembre de 1943 y se nos iba en el mismo lugar, el 21 de agosto de 2015, hace exactamente 2 años. Aunque nunca nos dejó, porque su legado vivirá por siempre.
Si existiera la carrera,
bien podría haber sido "licenciado en caras", aunque un doctorado tampoco le quedaría nada mal.
Se sumó al grupo Les Luthiers, desde su fundación en 1967, de la mano de Gerardo Masana.
Rabinovich tocaba principalmente la guitarra (como en la "payada de la Vaca") y el violín, además de instrumentos informales como el "bass-pipe a vara" o el "calephone".
Pero la lista de instrumentos formales la integran el bajo eléctrico, la batería, el bombo, la flauta, guitarra, sintetizador y trombón, entre otros. Y la lista de los informales puede ser eterna.
Talentoso como pocos, en 1969 se graduó como escribano público, profesión que ejerció apenas durante tres años.
También podía remplazar a Marcos Mundstock en la presentación de... mejor lo dejamos ahí.
No todo fue tablas en su vida. Porque también estuvo en varias películas, como Espérame mucho (1983), Cine Negro (2007), ¿Quién dice que es fácil? (2007), Bolt (2008), Mi primera boda (2011), Extraños en la noche (2012) y Papeles en el viento (2015).
En Mi primera boda hicieron un dúo genial y desopilante con Marcos Mundstock, en una especie de "clásico" católico-judío... como siempre.
En la TV compartió pantalla con el Negro Fontova y Jorge Guinzburg (1989) en Peor es nada, también estuvo en Juana y sus hermanas (1991), Continuará (1996), Leche (1996), La Argentina de Tato (2000), homenaje a Tato Bores, Tiempo final (2004), Algo habrán hecho por la historia argentina (2006), Recordando el Show de Alejandro Molina (2011), de Alejandro Dolina y Juan José Campanella, y La Dueña (2012).
En diciembre de 2012, mientras Les Luthiers se encontraba de gira por Uruguay, sufrió un infarto agudo de miocardio que lo dejó fuera en las últimas presentaciones del grupo.
Fue, justamente, debido a problemas cardíacos, que falleció el 21 de agosto del 2015, a los 71 años.
Seguramente ahora estará robando sonrisas junto a otros grandes que también nos dejaron... y por qué no, haciendo escuela con El explicao, siempre "juiiiiiira" de programa.