El Gobierno autorizará para diciembre un incremento del 5% del impuesto a los combustibles, por lo que no aplicará por completo la suba impositiva para no sumar más presión a los precios en los surtidores, con lo cual el proceso de actualización quedará para el próximo gobierno.
De esta manera, si se concreta un aumento impositivo del 5% a partir del 1 de diciembre le quedará al próximo gobierno decidir cómo aplicar el 15% restante acumulado durante 2019, postergado tanto por el contexto de volatilidad macroeconómica como para evitar su efecto en la campaña electoral.
El incremento del 5% fue confirmado por fuentes del Palacio de Hacienda y la Secretaría de Energía al explicar que la decisión será motivo de una resolución de la Secretaría de Ingresos Públicos que se dará a conocer antes de fin de mes, y que no aplicará el total acumulado como se interpretó del decreto 753, de comienzos de noviembre.
Para comienzos de diciembre se anticipa que las petroleras aplicarán un nuevo incremento en sus precios en las estaciones de servicio de todo el país en procura de reducir el atraso que estiman en torno al 10% respecto a la paridad de importación, aumento que deberá contemplar el efecto impositivo.
El gobierno a lo largo del año decidió, en distintas oportunidades, postergar o aplicar parcialmente los incrementos del impuesto de cálculo trimestral y que toma como referencia la variación del Indice de Precios al Consumidor, lo que generó un atraso estimado en un 20%.
La decisión de un aumento parcial se da en momento en que el sector de combustibles atraviesa por un proceso de incremento de precios tras el descongelamiento iniciado el 14 de noviembre y que motivó un aumento de todas las petroleras del 5% para todos sus productos en surtidor.