La adolescente era oriunda de Chubut y cursaba la carrera de veterinaria en la Universidad Nacional de La Plata; sus padres decidieron donar sus órganos
Una estudiante de 18 años murió este lunes en La Plata al tirarse de un colectivo de la línea 214 en el que viajaba porque lo había tomado por error. El hecho ocurrió el viernes pasado alrededor de las 13 en la calle 60 entre 122 y 123, casi en el límite con Berisso.
Una cámara de seguridad de la cuadra registró el momento en el que la joven se arrojó al asfalto, mientras el transporte circulaba a una considerable velocidad. La adolescente impactó de lleno contra el pavimento y rodó unos metros hasta que quedó sobre el cordón de la vereda. Inmediatamente, el chofer, que previamente intentó evitar que se baje y está imputado en la causa que la Justicia inició por “homicidio culposo”, se detuvo.
Isabella Marino era oriunda de la ciudad chubutense de Gaiman, en la Patagonia y estudiaba veterinaria en la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), precisó 0221. Pocos días antes llegó a la capital de la Provincia de Buenos Aires para empezar a cursar la carrera.
Aunque el hecho todavía es materia de investigación, la principal hipótesis que tienen los especialistas es que se equivocó de colectivo y, al percatarse de que iba en una dirección equivocada, quiso bajarse. Tras el fuerte golpe, informó El Día, se descompensó y fue trasladada al Hospital Larrain donde horas después se constató de que tenía muerte cerebral. Sus padres, ante ese diagnóstico, decidieron que sea desconectada y donaron sus órganos.
Su fallecimiento conmocionó a La Plata y, sobre todo a Gaiman, una localidad de unos 10.000 habitantes ubicada a unos 15 kilómetros de Trelew, la capital de Chubut. La Municipalidad, de la que su tía Noelia Stagnitta es asesora legal, emitió un comunicado en el que resaltó que son “momentos de profundo dolor”.
La Escuela Agrotécnica N° 733 Benito Owen, en la que hizo parte de sus estudios, la despidió en redes sociales con un sentido mensaje: “No hay palabras para expresar nuestro dolor por tu partida, ni explicación posible. Atesoramos en nuestros corazones tu sonrisa, tu frescura, las horas de todos los años compartidos. La familia de Agro733 abraza a la familia de Isabella, a sus compañeros y personal que fueron parte de su vida. En cada estrella del cielo y en cada huella de tu trabajo seguirás con nosotros. ¡Gracias Isabella!”.
Otro de los allegados que se expresó en Facebook fue José Amiott: “Flaca, qué rápido te llevó la vida. Y qué injusto. Recuerdo tus trabajos perfectos, la sonrisa parca, pero más aún tu empatía con el resto. Sos una bellísima persona, Isabella Marino. Que en paz descanses”.
