Llegó el día. Este martes por la noche, apenas unos minutos después de las 21 horas, Wanda Nara habló por primera vez sobre el escándalo amoroso ocurrido entre ella, su marido Mauro Icardi y Eugenia La China Suárez, señalada como la “tercera en discordia”. Si bien la mediática se expresó sobre el asunto en sus redes sociales y también lanzó mensajes a través de Yanina Latorre, esta vez, por fin, se escuchó su voz.
Lo que se vio en Telefe Noticias fue un adelanto de un especial que Susana Giménez rodó en París para mostrar la vida de Wanda e Icardi en la capital francesa y, además, hablar del tema que tuvo en vilo al país. Las grabaciones se realizaron en distintas locaciones de la “ciudad luz”: por ejemplo, se la vio a la mediática manejando un auto de lujo que compró su marido apenas comenzó a jugar en el Paris Saint Germain. También se realizaron tomas en el exclusivo Hotel Ritz, en el que se hospedó la diva junto a su equipo de producción, compuesto por alrededor de 18 personas.
“Buenas noches a todos”, saludó Susana con la Torre Eiffel de fondo. La postal más representativa de la noche parisina y la nota más buscada por el periodismo de espectáculos en el último mes. “Yo quería hablar con vos”, dijo Wanda Nara luego de entrar en el cuadro. “Ahora empieza el Wanda Gate”, anunció Susana, más cómodas en el hotel, sentadas en sillones, siempre con el emblema de la ciudad luz detrás.
“Cómo empezó esto?¿Vos le viste el teléfono a Mauro?”, preguntó Susana sobre el inicio de la crisis. “Estábamos en un campo, estaban las nenas andando a caballo y busqué una foto en el teléfono. “Ahí vi pantallazos de un chat con una mujer muy famosa que ya saben”, señaló en referencia a la China, a quien nunca mencionó.
Es obvio que se empiezan a generar un montón de versiones, a veces cuando no querés hablar empiezan a inventar. Es lógico”, señaló comprensiva. “Es el precio que una paga por ser famosa”, interpretó Susana. “Es la culpa que pago por ser impulsiva”, reconoció Wanda: “Lo primero que se me vino a la cabeza fue poner una historia”, señaló en referencia a “Otra familia que te cargaste por zorra”, la frase que empezó todo en la tarde del sábado 16 de octubre.
“Ellos tienen que saber que cualquier mujer se moriría por estar en el lugar. Yo conozco las partes buenas y las partes malas, la vida real no es lo que una muestra en Instagram, cuando estamos tristes no lo mostramos”, analizó la empresaria, antes de recibir la frase de Susana.
“Vos eras amiga de la China”, afirmó Susana, aunque Wanda marcó un límite. “No era amiga, tenía buena relación, cordial. Mi enojo fue una mirada machista, de echarle la culpa a la mujer. Después tomé distancia, y admiro que una mujer pueda ser libre. Yo soy una mujer chapada a la antigua: para mí un mensajito es divorcio”, reconoció, y se imaginó en la situación opuesta. “Los mensajes no los hubiera escrito y no me gustó que no me hayan contado del otro lado”; respondió sin dar demasiados detalles. “Nunca tuvimos problemas de este tipo, te lo puedo jurar por mis cinco hijos. Cuando vi el mensaje, agarré mis cinco hijos y en el primer avión me fui a Italia. Y él se vino en el avión atrás mío”, afirmó.
“Hablamos un montón, él me dijo que piense en la familia, que fue el error de su vida. Nosotros nos contábamos cualquier cosita”, reveló la empresaria. “Él no parece ser un tipo mujeriego”, intuyó Susana. “No, pero a cualquiera le puede pasar, lo importante de esto es que pudimos poner un stop a la relación. Plantearnos seguir o no seguir”, reconoció Wanda. “Él te dijo que si se separaban dejaba el fútbol”, apuntó Susana. “Hay que ver si lo hubiera hecho, son cosas que uno dice”, replicó Wanda.
“¿Se vieron la China y Mauro?”, preguntó Susana de repente. “Parezco una chusma pero es lo que tengo que hacer hoy”, agregó casi como para justificarse. “Confiamos los dos ciegamente en todo, yo pongo las manos en el fuego por Mauro, pero sentí que hubo un quiebre. Después él me dijo que hubo un encuentro y que no fue nada. Yo pienso que podría haber pasado de todo pero es verdad que no pasó nada”, añadió.
Respecto a este encuentro, y todavía sin nombrarla, reconoció haber llamado a la China. “Lo primero que hice fue pedirle perdón por esa historia que había usado una palabra no muy elegante que había usado en un momento de calentura”, reconoció. “Es comprensible, es humano que uno se equivoque”, avaló Susana. En este punto, Wanda explicó por qué había decidido perdonar a su marido: “Podemos seguir juntos, y volvería a empezar con él. Porque fue él el que me mostró las cosas como pasaron, y está arrepentido. Yo creo en el perdón y creo en la palabra. Lo miré a los ojos, estuvimos solos y creo en su arrepentimiento”, sentenció con firmeza.
A continuación, Susana le preguntó por la videollamada que compartió con la China: “Cuando Mauro me cuenta del encuentro, rebobino y me acuerdo que ella en un recital me había llamado, en realidad llamó a otra persona y le dijo ‘pasame con Wanda’. Yo estaba con mis dos hijas sentadas a upa”, evocó en referencia al recital de Camilo en París al que acudieron entre otros Lionel Messi y Antonela Roccuzzo. “Ahí le pregunté. ‘Habías estado hace cinco días con él y pedís hablar conmigo cuando estaba con toda mi familia’. No me acuerdo que explicación me dio, pero lo que hablamos va a quedar y no me interesa dar detalles. Yo le pedí disculpas”, repitió.
“Todo pasa en la vida por algo, lo importante es el amor”, resumió Wanda. “Y que no pasó nada”, agregó Susana, refiriéndose al encuentro entre el futbolista y la actriz. “¿Vos decís que es lo importante? Mauro dice lo mismo que vos”, replicó la empresaria no muy convencida. “Tuvimos los dos la posibilidad de volver a elegirnos. Y eso fue lo más importante”, resumió. En relación a cómo transitó estos días, contó qué se refugió en sus afectos y reveló una curiosa frase de su madre, Nora Colosimo: “Me decía: ‘lo que más quiero es abrazar a Mauro’. O sea, ¿de qué lado estás? Mamá me dice que soy muy antigua de cabeza. Por eso rescato la sinceridad de Mauro”.
Yo puse una historia sacada de los pelos, me preguntaron si me había separado y dije que sí. “Yo no lo podía creer. Uno se da cuenta quién se ama”, replicó Susana, que le preguntó por el comunicado de la actriz: “Lo leí. Me pareció muy complicado para entenderlo, no sé si yo soy demasiado tonta”, admitió. “Entiendo que haya mujeres que viven diferente”, repitió.
Hacia el final del adelanto que se vio por Telefe, Mauro Icardi hizo su ingreso al estudio. Abrazó a la conductora y le dio un beso a su esposa. “Yo no estoy arreglado, vine así nomás”, se justificó por su look informal en contrapunto con la elegancia que mostraban las dos mujeres. “Pensé que quería cobrar por estar acá”, se sorprendió Wanda, que le regaló a la diva parte de su línea de cosméticos en una enorme caja roja de un corazón, y dejando en ese gesto una metáfora del continuará. Para saber cómo sigue la historia, habrá que esperar el programa completo que se verá el 30 de noviembre por Paramount+.