El mes pasado, la Secretaría de Energía dispuso de un aumento en los precios máximos de referencia de las garrafas de 10, 12 y 15 kilos. En total, se trató del 8,54 por ciento según la resolución publicada en el Boletín Oficial.
A pesar de la normativa regente, y hasta la semana pasada, distribuidoras locales comercializaron el producto por encima del valor permitido. «Hicimos actas por infracción por estar a un precio superior obviamente al que establecía la resolución», indicó el subsecretario de Comercio, Juan José Ahmar, en diálogo con EL LIBERTADOR.
Según explicó, la venta de la garrafa de 10 kilos en mayo en los establecimientos debería costar como máximo 1.800 pesos, mientras que en varios lugares lo ofrecían hasta los 2.360 pesos. «Se han realizado esos operativos y seguiremos controlando», advirtió.
¿CÓMO ES EL PROCEDIMIENTO?
El funcionario señaló que, la Subsecretaría de Comercio tiene entre sus funciones verificar los precios, advertir a las empresas en caso de irregularidades, e incluso notificarlas a Nación.
De esta manera, enfatizó con el ejemplo de las distribuidoras de gas: «Se le labra el acta, se le corre el traslado y se le da 10 días hábiles para hacer el descargo, y después de eso obviamente se le multa», dijo.
ALTERNATIVA HOGAR
En la última resolución, la Secretaría de Energía también autorizó una asistencia de 948.275.757,45 pesos para veinte empresas productoras del país, con el propósito de asegurar el suministro de garrafas en hogares de bajos recursos.
Por lo tanto, el precio máximo de referencia para la garrafa de 10 kilos pasó a ser de 724 pesos para los fraccionadores, de 1.270 pesos para los distribuidores, y de 1.334 pesos para la venta al público.
