Una familia tipo correntina necesitó en marzo casi 170 mil pesos para cubrir la Canasta Básica Total (CBT) y no estar por debajo de la línea de la pobreza. La Canasta Básica Alimentaria (CBA), que marca el parámetro de indigencia, quedó en 75 mil pesos.
La delegación correntina del Instituto de Investigación Social Económica y Política Ciudadana (Isepci) publicó su Índice Barrial de Precios (IBP) de enero, que refleja el costo de vida con respecto a la alimentación saludable y los servicios esenciales para el bienestar de cada familia.
DETALLES
El último IBP reflejó que un grupo familiar, compuesto por dos adultos y dos niños, precisó 169.869,21 pesos para cubrir la CBT y no ser pobre, luego de que se identificara un aumento del 5,26 por ciento (8.495 pesos) con respecto a febrero.
Dicha canasta incluye necesidades básicas como alimentos, otros productos y servicios de salud, educación, transporte, alquiler, luz, agua, teléfono, Internet y vestimenta.
Además, el mismo grupo familiar requiere alrededor de 75.163,37 pesos para la CBA, que incluye los gastos para alimentarse adecuadamente, tras una suba del 5,37 por ciento (4.073,04 pesos).
Si se comparan los valores mencionados interanualmente, es decir con los de marzo de 2022, según el Isepci se identifica un aumento del 98,30 por ciento en la CBT y del 96,55 por ciento en la CBA.
Es decir que, para no ser considerada pobre, una familia debió tener 84.209,1 pesos más de ingresos que hace un año, y para no caer en la indigencia, 36.922,25.
En este contexto, el costo de la CBT subió un 21,02 por ciento en lo que va de 2023, lo que representa 29.501,83 pesos.
En ese mismo tiempo, la CBA se encareció en un 22,09 por ciento, es en realidad, 14.598,73 pesos.