Un 9 de diciembre de 2014, a las 8 de la mañana se dio a conocer la noticia de que el Papa Francisco designó obispo coadjutor de la Diocesis de Goya al presbítero Adolfo Ramón Canecin. El repique de campanas de la Catedral y de las parroquias del interior diocesano, anunciaban un nuevo obispo para la Iglesia de Goya. Tenía 56 años, perteneciente al clero formoseño y, hasta ese día era el párroco de San Francisco de Asís, en la ciudad de Formosa, y vicario general de la diócesis.
La información del nombramiento pontificio fue hecha pública en forma simultánea en Roma y en Buenos Aires. Aquí lo hizo el nuncio apostólico, monseñor Emil Paul Tscherrig, a través de la agencia AICA.
Accediendo al pedido del obispo de Goya, monseñor Ricardo Oscar Faifer, el papa Francisco nombró obispo coadjutor de la diócesis de Goya al presbítero Adolfo Ramón Canecín.
Hoy la feligresía diocesana da gracias a Dios Padre, por haber enviado a esta porción del Pueblo de Dios que peregrina en la provincia de Corrientes a este caracterizado pastor, que ocupa un lugar muy especial en los corazones del pueblo correntino.
A continuación, compartimos extracto de la editorial escrita por un periodista formoseño, el día que se conocio el nombramiento del padre Adolfo Canecin:
“ El “mitaí”, Adolfo es un formoseño de pura cepa, criollazo nacido dentro de la colectividad tana de las familias fundadoras bajadas del Vapor El Resguardo con el Comandante Fontana. Sus abuelos, “colonos fundadores”, se han instalado en la Formosa, que el Estado Nación Argentina decidió fundar por aquí luego de la Villa Occidental, abandonada por el laudo Hayes.
En su rostro y sonrisa; en su forma de hablar, jugar, divertirse; en sus gustos y pinta, es “jopará formoseño nomás…”. Hizo la Primaria en la Escuela N° 18, ubicada en los límites del barrio San Miguel, y la Secundaria en la histórica Escuela Industrial – ENET N° 1.
Destaco estos aspectos porque a mí como docente me encanta reconocer a personas que, habiéndose formado como “ñandé gente”, familia humilde, trabajadora, de la educación pública… alcanzan, como muchos formoseños, los perfiles de excepcionalidad para las grandes responsabilidades sociales que el país y el mundo exigen. Es “¡made in Formosa, for export!”.
“Felicitaciones Monseñor Adolfo Canecin, celebramos este dia, dando gracias a Dios por su cercanía de Padre y Pastor. Que nuestra tierna Madre de Itati, acompañe siempre su vida y ministerio” destacan desde la Oficina de Prensa del Obispado de Goya.-