Las cuatro agrupaciones de dicha localidad enviaron formalmente la solicitud al intendente Mariano Garay, expresan que bajo protocolos sanitarios están en condiciones de desfilar la noche del 13 de febrero venidero. En la víspera de los feriados nacionales de Carnaval.
“En la medida que el Covid-19 no avance o se mantenga en mínima la cantidad de contagios”, expresaron los representantes de las comparsas en la nota enviada al intendente.
Explican luego que sería una pasada de 45 minutos por agrupación en una extensión de dos cuadras. Entre las 22.30 y la 00.30 como duración total del evento.
La modalidad, explicaron, sería similar a la realizada en el verano de 2020 sobre la avenida San Martín.
En el último párrafo aclaran el deseo de los comparseros. “La inquietud que nos moviliza a este pedido, solamente es para no perder nuestra idiosincrasia y ofrecer a nuestra gente dos horas de ruido de tambores y baile e inyectándoles así una dosis de alegría y demás está decir, motivando al comparsero para un nuevo carnaval 2022 que se viene”.
No queda claro si en el desfile solicitado requieren público presente o el mismo será transmitido por algún medio de comunicación.
De ser viable, dicen en el último tramo de la nota, piden una reunión con el jefe comunal y sus funcionarios para coordinar la realización del evento.
Santo Tomé, según el último parte epidemiológico oficial posee cinco casos positivos. Su ubicación geográfica a orillas del Río Uruguay la ubica en el límite fronterizo con Brasil.