Saltar menú de navegación Teclas de acceso rápido
Recibí las notificaciones

DESBLOQUEAR NOTIFICACIONES

Siga estos pasos para desbloquear

Internacionales

«Fascismo», «enemigo de dentro»: Kamala y Trump endurecen sus ataques

Faltan menos de tres semanas para las presidenciales de EE.UU. y las campañas de Kamala Harris y Donald Trump tensan la cuerda. Los candidatos se prodigan en el puñado de estados clave que deciden la elección -la vicepresidenta estaba este miércoles en Pensilvania-, multiplican sus apariciones en los medios y aumentan la munición de sus ataques.El endurecimiento de los mensajes es más palpable -por novedoso- en Harris. Lejos queda la \'campaña de la sonrisa\' con la que inició su andadura como candidata demócrata a finales de julio, cuando el actual presidente, Joe Biden , renunció a su reelección. Hay señales en las encuestas de que su posición se debilita, de que el empujón de entusiasmo inicial por su candidatura -o de alivio por el adiós de Biden- puede que no sea suficiente para imponerse a Trump.En esa situación, buena parte del \'media blitz\' -apariciones constantes en los medios- en el que se ha metido Harris se dedica a atacar a su oponente. El martes pisó territorios inéditos para ella, con acusaciones a Trump de « fascismo ». Fue en una conversación radiofónica con Charlamagne Tha God, un locutor muy popular entre la minoría negra, donde la vicepresidenta necesita movilizar el voto. En un momento de la entrevista, Harris buscó ofrecer un contraste entre su visión para el país y la que tiene su rival. «La otra es fascismo, ¿por qué no podemos decirlo», dijo el locutor sobre Trump. «Sí, podemos decirlo», replicó la candidata demócrata, que en el pasado ha hecho referencias a los guiños autoritarios del expresidente, pero sin llegar a este punto.Noticia Relacionada ELECCIONES EN EE.UU. estandar Si Kamala se desinfla y pierde terreno en la recta final de la campaña Javier Ansorena | Corresponsal en N. YorkEl intercambio ocurrió pocos días después de la publicación de un nuevo libro del periodista Bob Woodward en el que Mark Milley, el general que fue fue jefe del Estado Mayor bajo Trump, califica al expresidente de «fascista total».No fue el único ataque de Harris en la entrevista. También le acusó de debilidad. «Es débil. Es una señal de debilidad el que quiera complacer a dictadores y que le regalen elogios y favores», dijo sobre Trump, en medio de revelaciones de que el expresidente envió test de Covid a Vladimir Putin cuando eran escasos en EE.UU. y de que siguió en contacto con el presidente de Rusia una vez fuera de la Casa Blanca. «Es débil y no está capacitado para el cargo».Donald Trump pronuncia un discurso durante un mitin de campaña en el Cobb Energy Performing Arts Center, en Atlanta, Georgia AFPEn apariciones anteriores de esta semana, Harris también había dicho que Trump es una persona «inestable y trastornada» y que es «peligroso». Era una respuesta a las últimas declaraciones explosivas del expresidente. No era uno de sus habituales insultos a Harris -él le ha llamado a ella de todo, desde «fascista» a «marxista»- sino una mezcla de ataque y amenaza a los rivales demócratas.Hace unos días, Trump aseguró que ellos son el «enemigo de dentro» y que son «más peligrosos» que las dictaduras rivales de EE.UU., como Rusia o China. Inmediatamente después, deslizó que la Guardia Nacional debería desplegarse contra los «lunáticos de la izquierda radical» que busquen sembrar «caos» en la elección (Trump no tendría autoridad para ello, si gana la elección no jurará su cargo hasta finales de enero del año que viene). En el pasado, Trump ha hecho menciones similares: «Yo soy vuestro guerrero, yo soy vuestra justicia, yo soy vuestra venganza», dijo a un grupo de seguidores en marzo de 2023; «la venganza a veces está justificada», defendió el pasado mayo.El revuelo causado por sus últimas palabras no le ha forzado a dar marcha atrás. En su siguiente intervención, en una entrevista con Bloomberg News, defendió que los demócratas son «malvados» y «peligrosos». Al mismo tiempo, se negó a comprometerse a una transferencia pacífica del poder tras la elección del 5 de noviembre y se excusó diciendo que eso ya se produjo en 2020 (pese a que se negó a reconocer los resultados, presionó a las autoridades para cambiarlos y tardó horas en exigir públicamente a sus seguidores que pusieran fin al asalto violento al Capitolio del 6 de enero de 2021).Esas declaraciones del «enemigo de dentro» y la amenaza del despliegue de la Guardia Nacional en la elección han sido utilizadas por Harris y su campaña para acusar a Trump de querer enviar el ejército contra sus rivales si gana en noviembre. «Él considera a cualquiera que no le apoye o que no ceda a su voluntad como un enemigo del país, es algo serio», ha dicho la candidata. Al día siguiente de que Trump pronunciara esas palabras, la campaña demócrata las proyectó en un mitin de Harris y planea que protagonicen nuevos vídeos de propaganda electoral. El equipo de Trump ha defendido que los ataques de Harris son una muestra de «desesperación» porque va perdiendo y representan la «retórica desagradable que ha llevado a dos intentos de asesinato contra el presidente Trump».

Dejá tu opinión sobre este tema

Noticias destacadas

Más noticias

Te puede interesar

Newsletter

Suscribase a recibir información destacada por correo electrónico

Le enviamos un correo a:
para confirmar su suscripción

Teclas de acceso