Si por algo se caracteriza Calin Georgescu , que concurre con buena posición de salida a la segunda vuelta de las presidenciales rumanas el próximo domingo, es por su carácter impredecible. El candidato independiente carece de programa concreto, más allá de una visión patriótica antieuropea. Pero sobre su orientación prorrusa y contraria a la OTAN no cabe ninguna duda. Y por si alguien albergaba todavía alguna, lo ha dejado claro en sus primeras declaraciones desde que el Tribunal Constitucional dio por bueno el segundo recuento de los resultados de la primera vuelta. Si llega a la Presidencia, Georgescu someterá a una «reevauación» el escudo de Deveselu, el sistema de radares y baterías antimisiles de la OTAN que protege su flanco oriental.Deveselu, un municipio por lo demás anónimo en el sur de Rumanía, es pieza clave del escudo antimisiles estadounidense, a través del cual Washington, el primero entre iguales en la OTAN, protege a sus aliados europeos. Incluye también una instalación radar terrestre en Turquía, cuatro naves de la US Navy equipados con armas antimisiles en España, un centro de mando en la base aérea Rammstein en Alemania, así como un segundo interceptor terrestre construido en Polonia, similar al que está en Rumanía. «Nuestra seguridad depende de vuestro trabajo», dijo en mayo de 2016 el entonces presidente de Rumanía Klaus Iohannis , que participó en la inauguración junto al todavía secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg . Ahora, sin embargo, la continuidad de la base de Deveselu es puesta en cuestión por Georgescu. «Necesitamos reevaluarlo», ha dicho, «se evaluará todo de nuevo: cuáles son las ventajas, cuáles pueden ser las ventajas o los problemas en el futuro, qué ha sucedido hasta ahora», ha declarado, «todo será transparente, todo se hará legalmente, con precisión, constitucionalmente, más allá de mi derecho a transferir esta garantía constitucional a los partidos políticos. Y les pido que garanticen la dignidad de cada ciudadano rumano».Noticia Relacionada estandar Si Alemania acepta participar en una tropa de paz de la OTAN para Ucrania Rosalía Sánchez «Por supuesto, todo lo que sirva a la paz en el futuro» será «apoyado con todas nuestras fuerzas por parte alemana», dice la ministra alemana de Asuntos Exteriores, Annalena BaerbockA unas cuatro horas de Deveselu, en dirección norte, se encuentra la base de Cincu, en la que la Brigada de Infantería de Marina \'Tercio de la Armada\' española acaba de formalizar la transferencia de Autoridad al Supreme Allied Commander Europe (SACEUR), en un acto castrense celebrado en el campamento \'General Berthelot\'. El Subgrupo Táctico Mecanizado de Infantería de Marina pasa así a estar bajo el mando de la OTAN en Rumanía, como uno de los ocho batallones de la fuerza multinacional bajo el Mando Operativo de Operaciones MOPS y con la misión de proteger el flanco oriental de la OTAN, un despliegue de carácter disuasorio que Georgescu amenaza con retirar si llega a la Presidencia. Está intentando maniobrar, además, para abrir paso a una gran coalición de derechas y extremas derechas hacia el gobierno de Bucarest.Georgescu confía en que el socialdemócrata Ciolacu , el más votado en las elecciones parlamentarias de la semana pasada, no pueda llegar a formar gobierno y se ofrece para propiciar un gobierno estable a partir de la «coalición que se presente con una mayoría». En las recientes elecciones, los conservadores han perdido 12 puntos, pero el partido ultranacionalista Alianza para la Unión de los Rumanos (AUR), de George Simion , que desea anexionar territorio moldavo, ha duplicado su apoyo creciendo desde el 9% hasta el 18%, a pesar de haber sufrido dos escisiones: SOS Romania, que ha entrado con un 7% en el parlamento, y el Partido de la Juventud (POT), con un 6%. Estos partidos, liderados por Diana Şoșoacă y Anamaria Gavrilă , respectivamente, podrían ayudar a sumar fuerzas.Otro partido, POT, había adelantado su apoyo a Georgescu antes incluso de lograr notoriedad. Georgescu ve posibilidades de asociación, aunque no desvela a sus favorito para la jefatura de gobierno, difícil de acordar entre directivas muy enfrentadas en lo personal, ni para encabezar los servicios de inteligencia o la Fiscalía General.«El domingo, los rumanos tienen una opción muy clara en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales. Elegir a la candidata de la Unión Salvemos Rumanía, Elena Lasconi , una candidata liberal-demócrata, orientada hacia la Unión Europea, la OTAN, Estados Unidos, pro-Israel, que promete continuidad y cierta estabilidad. O elegir a Calin Georgescu e hipotecar el futuro de Rumanía a Moscú en lugar de a Bruselas«, resume la situación Alon Pinkas , exdiplomático y asesor de los primeros ministros Ehud Barak y Simon Peres . « Putin estaría encantado de crear un eje rumano-húngaro rebelde, disruptivo y vociferante en el corazón de la OTAN, exactamente lo que sucedería si Georgescu gana el domingo«, añade, »esta es la razón por la que Moscú está tan involucrado en las elecciones a través de una campaña de influencia, pagando cientos de mensajes de desinformación y vídeos promocionales que se originan en Rusia«.