Se trata de una tecnología desarrollada para la terapia génica. La idea es adaptarla a un spray nasal con un virus debilitado, que lleve instrucciones a las células de la nariz y la garganta, creando anticuerpos capaces de impedir que el coronavirus invada el organismo. Podría proporcionar seis meses de protección con una sola dosis.
Científicos de la Universidad de Pensilvania, en Estados Unidos, y la empresa de biotecnología Regeneron están investigando si una tecnología desarrollada para la terapia génica puede utilizarse para crear un spray nasal que evite las infecciones por el nuevo coronavirus.
La idea es utilizar un virus debilitado como vehículo para llevar instrucciones genéticas a las células en el interior de la nariz y la garganta, para que creen anticuerpos capaces de impedir que el coronavirus invada el cuerpo humano.
Los científicos están probando esa tecnología en animales. Según el director del proyecto, el profesor de Medicina James Wilson, si el spray funciona, podría proporcionar unos seis meses de protección con una sola dosis.
Wilson es un pionero de la terapia génica, que consiste en insertar código genético en las células de los pacientes para corregir defectos y tratar enfermedades.
Su equipo de investigación descubrió que los virus adenoasociados, que infectan a los animales y otros primates pero sin causar enfermedades, pueden ser modificados para transportar ADN sano en las células.
Ese trabajo llevó a la aprobación en 2019 de Zolgensma, el primer tratamiento para la atrofia muscular espinal, y los virus adenoasociados se investigan ahora para decenas de otras aplicaciones posibles.
El gobierno estadounidense contactó a Wilson en febrero para ver si su equipo podía usar esa tecnología contra el covid-19.
Pero los científicos de la Universidad de Pensilvania no pudieron avanzar antes de que Regeneron desarrollara dos prometedores anticuerpos sintéticos contra el coronavirus, que se adhieren a la superficie proteica del patógeno y evitan que invada las células.
Los anticuerpos de Regeneron se encuentran en ensayos clínicos, pero ya han recibido una aprobación de emergencia para su uso en pacientes con covid-19 leve o moderada con altos riesgos de sufrir una variante grave de la enfermedad.
Los médicos que trataron contra el covid-19 al presidente estadounidense, Donald Trump, le administraron esos anticuerpos.
Los investigadores esperan que el spray nasal logre entrar en las células epiteliales nasales y modificar su producción de proteínas para que fabriquen los anticuerpos de Regeneron.
Normalmente, las células inmunitarias son las únicas que pueden crear anticuerpos, lo que convierte este proyecto en una idea muy innovadora.
Como el coronavirus entra en los pulmones a través del conducto nasal, el spray podría impedir la infección.
Los virus adenoasociados tienen además la ventaja de crear solamente una leve respuesta inmunitaria, por lo que sus efectos secundarios podrían ser menos graves que los de las vacunas más avanzadas, que entrenan al sistema inmunitario para que reconozca una proteína clave del coronavirus.
La Universidad de Pensilvania y Regeneron esperan terminar sus pruebas en animales en enero, antes de pedir una autorización a la agencia de medicamentos estadounidense para empezar ensayos con humanos.