Las directivas del Partido Socialdemócrata (SPD) del canciller Olaf Scholz y de la opositora Unión Cristianodemócrata (CDU) están cruzando mensajes. Scholz se ha mostrado dispuesto a someterse a una moción de confianza en el Bundestag cuanto antes, tal y como le exige el líder de la CDU, Friedrich Merz , a cambio de que los conservadores voten a favor de varios proyectos legales antes de las elecciones anticipadas. Sin mayoría parlamentaria, después de la salida de los liberales del FDP de su coalición semáforo, Olaf Scholz busca una especie de gran coalición provisional con la que seguir trabajando en las próximas semanas. Merz ha mostrado buena voluntad y responsabilidad de Estado, para impedir el bloqueo institucional, pero ha advertido que la CDU examinará uno por uno cada proyecto. Sobre la mesa está, por ejemplo, la posibilidad de que el 1 de enero aumente la prestación por hijos a cargo, una medida social que encaja también con la política de familia de la CDU. También hay posible acuerdo sobre la denominada «progresión fría» , un mecanismo para que los empleados no pierdan dinero cuando, debido a un aumento salarial, aumenta también el tipo impositivo y terminan perdiendo dinero en términos netos. Se trataría de compensar ese fenómeno ajustando el tipo del impuesto sobre la renta.Noticia Relacionada La coalición semáforo pende de un hilo estandar Si La oposición alemana pide elecciones anticipadas a principios de año Rosalía Sánchez | Corresponsal en berlín Otro de los posibles acuerdos versaría sobre la ayuda militar alemana a Ucrania , que debería seguir llegando, independientemente de la cuestión de cuándo exactamente se celebrarán las elecciones y quién será el próximo canciller. Si la CDU se presta a votar estas medidas, Scholz está dispuesto a somenterse al voto de confianza antes de Navidad. El miércoles podría surgir la oportunidad de anunciar esta gran coalición temporal, cuando Scholz realice una declaración del gobierno ante el pleno del Bundestag.Uno de los proyectos legislativos que la CDU avanza que no votará es la introducción de los mecanismos para el establecimiento del servicio militar , presentado la semana pasada por el ministro de Defensa Boris Pistorius . No es que la CDU esté en contra del servicio militar, sino que considera este proyecto demasiado blando. El vicepresidente del grupo parlamentario de la CDU, Johann Wadephul , ha declarado que su partido «quiere un verdadero servicio militar obligatorio y no un cuestionario no vinculante». «Es lo que quería también el ministro de Defensa, Pistorius, lo ha reconocido, pero no pudo imponerlo en el seno de la coalición». «Los tiempos son demasiado serios para hacer compromisos políticos», ha justificado Wadephul, «la amenaza de Rusia y la escasez de personal de la Bundeswehr hacen necesarios otros modelos». La CDU se orienta hacia los modelos escandinavos, que toman registro de todos los jóvenes de 18 años y reclutan a aquellos que sean aptos para el servicio militar y que demuestren están preparados.El Partido Liberal (FDP), que acaba de salir del Gobierno, ha mostrado también por su parte el deseo de votar a favor de alguno de los proyectos legales, como el freno a la «progresión fría». «Por supuesto, el FDP podría votar a favor de esta reforma fiscal que yo mismo elaboré», ha declarado el destituido ministro de Finanazas y líder del FDP, Christian Lindner . Estos potenciales acuerdos a corto plazo suponen indicios de la forma de gobierno que pueda optar Alemania tras las elecciones, que podrían tener lugar en enero o en marzo. Si la colaboración entre las directivas del SPD y la CDU es fluida y fructífera, se especula con la posibilidad de otra gran coalición para la siguiente legislatura. Merz ha adelantado que ve al liberal Lindner de nuevo en la cartera de Finanzas, lo que habla de su predilección con un acuerdo con el FDP, pero ambos partidos no tendrían suficiente mayoría, según avanzan los sondeos. Las encuestas hablan también de las preferencias de los alemanes de cara a la próxima coalición de gobierno. La última de Civey para Focus señala como la más popular entre los encuestados a la colaboración entre la CDU y FDP, con el 25%, aunque no parece que pudiera obtener mayoría suficiente. Como segunda opción, el 21% muestra su preferencia por una «gran coalición» entre CDU y SPD. Una posible coalición tripartita, formada por CDU, SPD y FDP o CDU, Los Verdes y FDP, prácticamente no encuentran apoyo, con el 3% y el 1% respectivamente. Las coaliciones con AfD o la alianza Sahra Wagenknecht siguen políticamente fuera de discusión.