Lagrimeo, mucosidad y estornudos pueden convertirse en unos síntomas molestos y continuos si tenemos alergia a los ácaros, una presencia habitual en las casas donde se acumula polvo. Y no debería ser así. Más allá de evitar exponernos a los ácaros, esta alergia tan extendida tiene tratamiento y es efectivo.
Entre las alergias más comunes, se sitúa en primer lugar la de los ácaros del polvo. Estos pequeños gérmenes que lo invaden todo son los responsables de la mayoría de las alergias respiratorias.
Cuando se desarrolla este tipo de alergia, es necesario saber que no es estacional, sino que afecta durante todo el año y en cualquier lugar donde se pueda acumular polvo, ya sean tiendas, oficinas, almacenes... No obstante, es más común en primavera y otoño por la humedad.
POR QUÉ APARECE LA ALERGIA A LOS ÁCAROS
Las alergias son una respuesta excesiva de nuestro sistema inmune. Nuestras defensas reaccionan equivocadamente ante algo que no nos hace daño. En este caso los ácaros.
Es inevitable que el polvo se acumule en nuestras casas, especialmente cuando vivimos en grandes ciudades. Estanterías, libros, cojines, peluches, alfombras… son el hábitat preferido de los ácaros.
Es habitual que este tipo de alergia aparezca ya desde la infancia. Los estudios recientes apuntan en la dirección de que los niños de ciudad están teniendo un déficit de naturaleza que les lleva a tener un sistema inmune debilitado.
Otros estudios apuntan al desequilibrio de la microbiota intestinal (muy relacionado con el sistema inmune) como culpable del aumento de casos.
SÍNTOMAS DE LA ALERGIA A LOS ÁCAROS
Los síntomas de las alergias respiratorias y en especial las de la alergia a los ácaros del polvo son:
Estornudos, especialmente matutinos dado que por la noche se han acumulado en los colchones los ácaros.Picor de ojos y lagrimeo.Congestión nasal. Las defensas producen más mucosidad para expulsar de las fosas nasales a los supuestos invasores.Tos e irritación de garganta. Parecida a la que provoca un constipado.Dificultad para respirar. En los casos más serios, la congestión o la inflamación de la garganta puede dificultar la entrada de aire.
Ten presente que con frecuencia las alergias a los ácaros van acompañadas de alergias a pelos de gatos y perros. No es de extrañar que aparezcan síntomas similares si tenemos mascotas.
MEDIDAS EFICACES CONTRA LOS ÁCAROS
Cuando el sistema inmunitario reacciona de forma visible ante la presencia de estos microorganismos, es imprescindible evitar que se acumulen en casa, y para ello lo que podemos hacer es:
No utilizar alfombras ni en la habitación ni en ningún espacio de la casa si es posible.Alejar cojines de plumas, ropa fuera del armario o peluches en habitaciones de niños.
Pasar el aspirador cada día puede ayudar a evitar que se acumule polvo en casa
- El alergólogo puede recomendar algún acaricida (spray antiácaros) para ayudar a disminuir la cantidad de estos microbios en casa.
- Intentar evitar el exceso de humedad, ya que los ambientes húmedos favorecen la presencia de hongos, que sirven de alimento a los ácaros.
- Dejar a otros la limpieza de la casa. Si se levanta polvo y lo respiras, podemos exacerbar el problema y sufrir una reacción aún mayor.
- Limpiar con un paño húmedo cualquier superficie para no levantar polvo y que se acumule en otro lugar.
- Una buena opción sería pasar el aspirador con filtro especial antiácaros cada día.
- Ventilar un rato el dormitorio a primera hora de la mañana, y a continuación cerrar para que no entre polvo del exterior.
- Intentar que en el cuarto no haya estanterías, libros o cualquier otro objeto que pueda acumular polvo con demasiada facilidad.
- El pijama deben estar fabricados con telas que acumulen poco polvo, así que nos olvidaremos de los afelpados.
- Las sábanas deben lavarse a 60 grados y limpiar la ropa de la temporada anterior antes de volvérnosla a poner. En especial los jerseys.
- Si hay cortinas, sería ideal que se les pudiera pasar un trapo húmedo a diario.
- El colchón y la almohada también deberían ser de algún material que no acumule polvo (fibras sintéticas). Y en ningún caso de lana o pluma.
- Los purificadores de aire pueden ayudar a combatir la alergia, pero el aire acondicionado está desaconsejado.
Los purificadores de aire pueden ayudar a combatir la alergia, pero el aire acondicionado está desaconsejado
TRATAMIENTO Y VACUNA DE LA ALERGIA A LOS ÁCAROS
Como ante cualquier trastorno o enfermedad, el mejor tratamiento es la prevención, aunque como ya hemos comentado, mantener el polvo a raya es complicado en algunas situaciones.
Y esto sucede todavía más en determinadas épocas del año como el otoño o primavera, cuando la temperatura y la humedad relativa del ambiente propicia que proliferen los ácaros.
Si con las medidas propuestas no es suficiente, hay medicamentos eficaces para aliviar los síntomas de la alergia: los antihistamínicos.
El alergólogo se encargará de hacerte las pruebas para confirmar el origen de la alergia y recetarte algún medicamento para aliviar los síntomas.
Existen además vacunas para acostumbrar a las defensas a que reconozca los ácaros y no reaccione a ellas.
Se trata de una vacuna sublingual. El fármaco se presenta en forma de líquido que se coloca debajo de la lengua. Te la pones tú mismo en casa. Se administran 4 o 5 dosis a la semana y durante 4 o 5 años.
También sería interesante fortalecer la microbiota intestinal y alimentar sus bacterias beneficiosas para fortalecer el sistema inmune en desequilibrio.