Hoy les traemos una receta ideal para comer con invitados en casa, o para agasajar a la familia. Muslitos de pollo a la cerveza, una receta fácil y accesible, que no necesita demasiada elaboración y que se disfruta un montón.
El sabor de la cerveza queda riquísimo con distintas carnes, y con el pollo no es la excepción, queda tierno, sabroso y jugoso, ¡¿qué más se puede pedir?!. Aquí les dejamos algunos consejos para prepararlo y, por supuesto, hay una receta con paso a paso para que salga perfecto. ¡A cocinar!
Pollo a la cerveza para deleitar a todos
El pollo es uno de los ingredientes más versátiles en la cocina y hay muchas formas de cocinarlo. Una de las recetas más populares y conocidas es la de pollo a la cerveza. Esta preparación combina la carne de pollo con los sabores de la cerveza, las verduras y las especias, creando una mezcla exquisita, incluso para los paladares más exigentes.
El pollo guisado a la cerveza es, básicamente, el pollo, que en este caso vamos a usar los muslos, cocido en una salsa hecha a base de cerveza, lo que le da un sabor intenso y característico. La preparación también incluye otros ingredientes como cebolla, ajo, zanahoria, apio y hierbas, que son importantes para complementar el sabor del plato.
El pollo se lleva bien con la cerveza
La cerveza es el ingrediente principal de la salsa, que le va a dar un sabor único al plato y se complementa con las especias, las verduras y la carne de pollo. Además, la cerveza ayuda a ablandar la carne, dándole una textura jugosa y tierna.
Ojo con las cantidades: Es importante no excederse con la cerveza, para evitar que quede con sabor amargo y dejar evaporar el alcohol antes de tapar la cacerola en la que se cocina. La elección de la cerveza queda a gusto de quien hace la receta.
Hay que tener en cuenta que algunas son más amargas que otras y eso se traslada al pollo.
De dónde viene la tradición del pollo a la cerveza
El pollo a la cerveza es una receta de origen europeo, que se ha popularizado en todo el mundo. Se cree que se originó en Alemania, a partir de la tradición de la fiesta de la cerveza, que nació en el siglo XIX.
En Alemania, un país con profunda tradición cervecera, esta bebida se disfruta de muchas maneras, y en la gastronomía local es un ingrediente fundamental ya que se preparan muchos platos a base de esta bebida.
El pollo a la cerveza para no pasar hambre
Sin embargo, también se dice que el consumo de pollo se popularizó, sobre todo, durante la Segunda Guerra Mundial, debido a la escasez de otras carnes. El maridaje del pollo con la cerveza fue una de las tantas formas de cocinar con lo que había al alcance, ante esa situación de falta de alimentos.
Además, la cerveza nunca faltaba entre las tropas que combatieron en la guerra, porque era utilizada como un elemento de motivación, para que los soldados pudieran atravesar la situación de estar en el campo de batalla por tanto tiempo.
Consejos para preparar los mejores muslos de pollo a la cerveza
Preparar un rico pollo a la cerveza no es difícil, pero es importante seguir algunos consejos para que los muslos queden jugosos y con un sabor exquisito:
Elegir buenos ingredientes: utilizar muslos de pollo frescos y de buena calidad, y también una buena cerveza. Si la cerveza es de mala calidad eso se va a impregnar en el sabor del plato. No escatimar con las verduras: las verduras que utilicemos en la salsa le van a aportar sabor al pollo, por lo que es importante que tenga una buena base de vegetales, tales como apio, morrón (pimiento), zanahoria, cebolla y ajo. Sellado previo: antes de cocinar el pollo a la cerveza, es importante dorar los muslos con un poco de aceite. Este paso no sólo aporta sabor al pollo, sino que también ayuda a sellar la humedad en el interior de la carne.
Tiempo de cocción: el tiempo de cocción depende del tamaño de los muslos de pollo pero, en general, se recomienda cocinarlos durante unos 30-40 minutos a fuego lento, para que queden tiernos y jugosos.
No remover demasiado: cuando los muslos se estén cocinando junto con los demás ingredientes, es importante no estar removiendo constantemente. Dejar que el pollo se cocine a su ritmo y moverlo solo cuando sea necesario para que no se deshaga.
Reposo: una vez que los muslos de pollo a la cerveza estén listos, es importante dejarlos reposar por unos minutos antes de servir. Esto permitirá que los jugos se redistribuyan y la carne se asiente.
Receta de muslos de pollo guisados a la cerveza
Rinde: 3 porcionesTiempo de preparación: 1 hora
Ingredientes
- 6 muslos de pollo
- 1 cebolla grande
- 3 dientes de ajo
- 2 zanahorias
- 2 ramas de apio
- 1 morrón rojo (pimiento)
- 1 lata de tomates triturados (o tomates para salsa pelados y triturados)
- 1 lata de cerveza negra (o la que prefieran)
- 1 taza de caldo de pollo
- 1 cucharadita de tomillo
- 1 cucharadita de ají molido
- 1 cucharadita de pimentón
- Aceite de oliva
- Sal y pimienta
Como hacer muslos de pollo a la cerveza paso a paso
- En una cacerola, calentar un poco de aceite de oliva a fuego medio-alto y dorar los muslos de pollo por ambos lados, aproximadamente 5 minutos por lado. Retirar y reservar.
- En esa misma cacerola, retirando el exceso de aceite del sellado, incorporar la cebolla picada, los dientes de ajo picados, las zanahorias peladas y cortadas en rodajas, el morrón cortado y el apio picado. Saltear unos minutos hasta que las verduras estén tiernas.
- Agregar los tomates triturados y dejar cocinar por unos minutos más.
- Incorporar los muslos de pollo, agregar la cerveza negra y el caldo de pollo. Añadir el tomillo, el ají molido y el pimentón y salpimentar a gusto. Cocinar unos minutos para que se evapore el alcohol.
- Bajar el fuego a medio-bajo, tapar la cacerola y dejar cocinar por 40 minutos o hasta que los muslos estén bien cocidos. Si se busca una consistencia más espesa para la salsa, hacer los últimos 10 minutos de cocción con la cacerola apenas tapada.
- Una vez listos, dejarlos reposar por un rato antes de servir. ¡A disfrutarlos!
