Hace frío y acercarse a la estufa es una tentación constante para las personas friolentas. Sucede que el cuerpo pierde su calor interno más rápido de lo que puede generarlo, y esto causa una desagradable sensación que lleva a querer permanecer acurrucados la mayor cantidad de tiempo posible.
La explicación es sencilla: los vasos sanguíneos se tienden a contraer para reducir el flujo de sangre y conservar el calor en el núcleo del cuerpo, donde es más importante mantener la temperatura. Pero ahí es cuando sufren las extremidades, como las manos, los pies y la cola, que se enfrían rápidamente. En ese momento, es cuando queremos acercarlos a los emisores de calor, ya sean braseros, calefactores o mantas eléctricas.
¿Por qué a las mujeres se les enfría más la cola que a los hombres? La teoría marca que los hombres tienen una distribución de la grasa más abdominal, o manzana. En cambio, la mujer tiene una composición ginoide, en donde la grasa se concentra en lugares puntuales, como la cola. Como la grasa es una zona poco irrigada, se enfría más fácil.
La exposición a una fuente de calor
El hábito de calentarse la cola en la estufa puede producir unas manchas oscuras de aspecto reticulado que, justamente, aparecen en la zona de la piel expuesta a una fuente de calor por debajo del umbral de la quemadura (43-47°C).
“Se llama Eritema Ab Igne, del latín, eritema del fuego. Se forma como una rojez en encaje y esto ocurre porque los vasos sanguíneos profundos de la piel tienen esa distribución, en círculos, como si fueran las calles que rodean una manzana”, describe Andrés Politi (M.N. 73.970), dermatólogo y miembro titular de la Sociedad Argentina de Dermatología (SAD). En resumen, dice, es la vasodilatación de las venas profundas de la piel.
Aunque por lo general se observaba más frecuentemente en personas de edad avanzada, actualmente no es raro encontrar estas lesiones en pacientes jóvenes o adultos de mediana edad. Las manchas son típicamente asintomáticas. Sin embargo, se reconocen casos de quemazón y prurito en algunos individuos.
En el caso de que la causa sea calentar la cola en invierno, la lesión suele verse en glúteos y cara posterior de los muslos. La buena noticia es que no es una dolencia grave y la lesión desaparecerá poco a poco, con tan solo dejar de arrimarse tanto a la fuente de calor directa.
El tratamiento incluye evitar la fuente de calor para prevenir lesiones futuras. El principal riesgo a largo plazo si se mantiene la exposición es el desarrollo de tumores malignos cutáneos.
La laptop, otra causa de Eritema Ab Igne
Las causas modernas de Eritema Ab Igne incluyen el uso de productos electrónicos. Las lesiones inducidas por laptop se encuentran típicamente en muslos y pueden ser unilaterales por la localización de la batería o elementos de calor de la laptop. Recientemente, se han descripto reportes de Eritema Ab Igne ocasionados por teléfonos celulares.