Contra todos los pronósticos de un verano extremadamente caluroso, diciembre se mostró con temperatura más bajas de lo esperado y además; con lluvias más frecuentes. Frente a este panorama, automáticamente surgen varios interrogantes: ¿Esto es normal? ¿Cuál es el rol del océano Atlántico y qué pasa con La Niña?.
Este 2024 -según confirmaron los especialistas- en Argentina se registró la primavera más calurosa jamás registrada en la Republica Argentina, aunque no es el caso del es de diciembre, que llegó y se va con un cambio radical con el ingreso de varios frentes fríos que, al menos a los «no tan amantes del verano», les ofreció un respiro un tanto reparador.
Esta situación, no pasa desapercibida y algunos especialistas se vieron obligados a analizar este fenómeno.
«Este diciembre fue algo eventual dentro de esta niña débil, incluso algunos dicen que estamos en un neutro, pero nosotros vemos más una niña cuando vemos la cantidad de acumulados que hubo, que fueron iguales a los esperados o quizás un poco más bajo y esta cuestión también trajo que la circulación atmosférica nos trajera más vientos fríos que vientos cálidos, por eso tuvimos mañanas bastante frescas, sobre todo en la zona del sur de La Pampa, con mínimas que llegaron a los 10 grados. Y bueno, ahora esto se va a ir revirtiendo con el paso de la semana, vamos a ir ya a una temporada estival con algunas jornadas bastante cálidas», explicó uno de los miembros del Centro de Monitoreo Meteorológico y Climático SAT, Jorge Giometti en diálogo con este diario.
Aunque diciembre se mostró completamente benévolo, su continuidad será solo una ilusión y los pronósticos que se habían anticipado a mediados de año, serán un hecho. Calor y humedad.
«La Cuenca Alta nos aportó el agua necesaria para que tuviéramos el río con la altura un poco más cercana a la normal, pero esa situación va a volver a retraerse y algo similar sucederá con el clima, vamos a tener jornadas con cielos muy despejados y muchos días consecutivos que van a ir haciendo levantar la temperatura y que serán bastante altas y si a eso le sumamos la humedad, vamos también a tener altas sensaciones térmicas. Esto que pasó fue un regalo», aseguró.
De la misma manera, Giometti confirmó que, al día de hoy la fase de La Niña no se ha concretado, y todo indica que, de hacerlo en este verano, será un evento fugaz y débil, sin mayor relevancia; por lo que, a partir del mes de marzo, va a ir decreciendo hasta transformarse en un «neutro» y para el otoño ya volveríamos a las temperaturas normales de la ópoca.
