En Córdoba se está desarrollando el juicio por la muerte de cinco bebés y el intento de homicidio de otros ocho en el hospital Neonatal de aquella ciudad, y los testimonios de este lunes complicaron aún más la situación de la principal apuntada: Brenda Agüero.
Yoselín Rojas, madre de Angeline, primera víctima fatal del hospital en 2022, aseguró que su hija fue “envenenada con potasio” y señaló a Agüero como la principal responsable.
Su bebé falleció en junio de ese año a causa de una bradicardia extrema y apnea provocadas por un exceso de potasio, y fue el primer caso que llegó a la Justicia cordobesa debido a que los padres comprobaron que el acta de defunción no había sido firmado por la médica de guardia.
“Era una mirada fría, muy rara. Cuando le da el bebé a mi pareja, nos miraba muy raro. No sé si con lástima o cómo. Nos miraba de reojo. Es la persona que se llevó el bebé (señalando a Agüero). Se la llevó a mi bebé y a los cinco minutos regresó pero sin mi hija”, explicó Rojas al Tribunal y a los jurados, agregando luego: “Vi una foto de una enfermera. Quería saber quién era la persona de la que hablaban. Cuando la vi en la foto, vi que fue ella quien se llevó a mi bebé”.
La autopsia posterior arrojó que la bebé “fue envenenada con potasio, le habían puesto una alta dosis”, y recordó que su hija había nacido en perfecto estado de salud, pero que a los 15 minutos los médicos le informaron que había sufrido un paro cardiorrespiratorio: “Nos dijeron que era inexplicable”.
“A nosotros nos hicieron creer que nada pasaba, cuando estaban pasando tantas cosas. Es un dolor grande. Vivimos ahora con ese dolor de por vida. Yo solo pido justicia. Por la muerte de mi bebé que se haga justicia. Hoy conté mi verdad por todos los bebés asesinados. Los mataron de forma cruel, bebés inocentes, no merecían morir”, dijo Yoselín.
Agüero permanece detenida desde agosto de 2022 y el juicio es un caso sin precedentes, al tratarse de asesinatos seriales de bebés.
Además de la enfermera, se encuentran en proceso otros diez imputados, entre ellos la entonces directora del hospital, Liliana Asís (encubrimiento agravado, falsedad ideológica y omisión de deberes de funcionaria pública) y el ex ministro de Salud cordobés, Diego Cardozo (encubrimiento e incumplimiento de deberes de funcionario público».