El referente del Movimiento de Liberación Nacional, Martín Ayerbe, sostuvo en diálogo con Conclusión que «la Argentina vive hoy una ruptura de representaciones que hace que no se atiendan las cosas que son necesarias para la vida comunitaria». En este sentido, reflexionó que tal situación «no puede ser superada dentro de los partidos políticos porque ya están muertos» y «no hay ninguna esperanza en los partidos políticos existentes porque están vaciados y tomados por una oligarquía política que todo lo dicta y todo lo decide».
«Esta ruptura se da porque la política no atiende los problemas del pueblo que son, principalmente, el trabajo, la seguridad en la calle, la buena convivencia, el descanso de la familia argentina. Tampoco se atienden los temas de infraestructura en lo que es transporte, logística y servicios públicos», agregó.
Ayerbe, que también preside el Foro Naval Hipólito Bouchard, profundizó en la primera parte de la entrevista sobre el concepto de «ruptura de representación» y también sobre la ausencia de legisladores en defensa del vaciamiento de la Fábrica Militar en Río Tercero.
«No es una crisis de representaciones, sino una ruptura de representación, porque los políticos profesionales, los políticos de carrera, no representan a la comunidad nacional de los argentinos, entonces esto está totalmente fracasado. Hace 50 años que estamos sumidos en una decadencia nacional que ha desmantelado a la Argentina en su producción para la defensa, en sus Fuerzas Armadas».
Al respecto, se refirió a la situación de la Fábrica Militar en Río Tercero: «En este momento la están vaciando, una fábrica que produce ácido sulfúrico y nítrico y que también produce, junto con Atanor y con la petroquímica Río Tercero de Córdoba, hasta el diisocianato de tolueno que es el que se necesita para fabricar la goma espuma de los colchones. Son los complejos industriales que permiten que haya una cadena de valor en Argentina y que no tenga que importar hasta los colchones».
«En este momento, como también en otras provincias de la Argentina, no hay representación federal de la política porque los políticos profesionales, no importa dónde hayan nacido, no representan a las provincias». Y se preguntó: «¿Dónde está el bloque cordobés planteando en Diputados y Senadores lo que está sucediendo en la Fábrica Militar y en la petroquímica Río Tercero, y a su vez en las plantas de Atanor que están en la provincia de Buenos Aires?, ¿Dónde está el gobierno de la provincia de Buenos Aires y su representación legislativa protegiendo las industrias químicas de base del país?».
Reconstrucción y nuevas representaciones a través de las organizaciones libres
Así las cosas, sobre este panorama de ruptura y desmembramiento de los partidos políticos, Ayerbe señaló que esto se da porque “la actual condición oligárquica del país no tiene concepción comunitarista, que es la verdadera doctrina nacional de los argentinos.
«Uno podría encontrar diferencias entre Perón e Yrigoyen, o entre peronistas y radicales, pero hay algo que los une, y es la idea de la comunidad organizada. Solamente hay soberanía nacional, si hay soberanía popular, sino la soberanía es izar la bandera, cantar el himno, realizar los actos patrios, pero de modo conmemorativo», apuntó.
«El pleno ejercicio del pueblo soberano llevando adelante el proceso de reconstrucción nacional, se tiene que dar a través de las organizaciones libres del pueblo. Ahí está la clave, en las organizaciones intermedias que son los sindicatos; las cámaras empresarias; las asociaciones de técnicos y profesionales; los colegios de enfermería, medicina, del derecho junto con clubes, sociedades de fomento, juntas vecinales».
Como ejemplo, citó la aparición de los repartidores de moto o delivery y explicó que con su llegada, «inmediatamente surgió la necesidad de formar un sindicato para establecer un régimen dentro de la actividad, que fuera justo y no de explotación».
Oligarquía partidaria, democracia y unidad
Ayerbe planteó que la salida a esta crisis de representación es que, «desde las organizaciones libres del pueblo, se corten los lazos y ataduras con las actuales direcciones políticas de los partidos políticos del país, de la partidocracia demoliberal que bien supo denunciar el general Perón y que Hipólito Yrigoyen describió como el régimen falaz y descreído».
«Este régimen formal de la democracia, que no es ninguna democracia sino que es el libre albedrío de la oligarquía partidaria, hay que cortarlo para poder establecer entre las organizaciones libres del pueblo un Consejo de conducción que una a todos aquellos que, con diversas actividades e intereses, están constituidos bajo un signo en común y que es la organización intermedia o libre y, a partir de allí, el movimiento nacional crear su propia forma orgánica de vida que es la que permite el circulante político en donde se contemplan los intereses de toda la comunidad nacional que está integrada por un pluriverso en donde hay distintas opiniones, distintos anhelos o propuestas».
Encuentro y las multisectoriales como espacio de resistencia
En cuanto a la representación política actual, Ayerbe dijo que es una expresión liberal, falsa de origen, y que está destajada de la vida nacional. Y abogó por la presencia de las multisectoriales en el contexto político actual.
En este sentido, señaló que las multisectoriales son «una de las más grandes expresiones de resistencia, desde la más grande que se constituyó en la Argentina contra la dictadura del 76».
«Son buenas experiencias. Y demuestran que, hay una voluntad de defensa nacional en los argentinos; que, ante los ataques se construyen las multisectoriales frente a un ataque contra el pueblo. Eso es fundamental, es orgánico y natural en la República Argentina», sostuvo.
Sobre la reconstrucción y la unidad, Ayerbe expresó: «Tenemos que ser capaces de la defensa, de poder ser nosotros aquellos que coronemos luego de repeler el ataque que generalmente viene organizado desde el extranjero. Porque sino, terminan colonizando el ataque los agentes sostenidos desde el extranjero, que vienen a usufructuar los lugares de representación”.
«Conviene volver a esa vieja enseñanza del general Perón que decía que ‘el partido en realidad es como un vestido que uno se pone en una noche muy especial, como puede ser un casamiento, y después se lo vuelve a guardar’. Porque lo que importa es la vida del movimiento y tiene que ser orgánica y, para eso, tiene que estar representada en las organizaciones libres».
El futuro inmediato
Finalmente, Ayerbe dijo que la preocupación de acá a fin de año, es no tener la capacidad para llevar adelante las propuestas planteadas anteriormente: con los sindicatos con los cuales está estableciendo relaciones y construyendo proyectos, con los colegios de técnicos y profesionales, con las organizaciones comunitarias de base como son las asociaciones civil, las sociedades de fomentos, los clubes de barrio o las juntas vecinales.
Y concluyó: «Para que el proyecto, constituido desde valores criollos, como es la técnica el estado empresario argentino, la pequeña y mediana empresa y la corporación de empresas nacionales en el campo de la vida productiva y económica del país, sean aquellos que alimenten la vida comunitaria desde donde deben salir los verdaderos y auténticos conductores nacionales de la Argentina».