Rafael Bofill fue condenado por el Tribunal Oral Penal Nº1, en noviembre de 2017, a la pena de cuatro años de prisión efectiva por "Homicidio Culposo Agravado por manejo imprudente y Antirreglamentario". Lo encontraron culpable de la muerte, tras un siniestro vial, de quien fuera en vida Guillermo Juaní. Estuvo prófugo hasta abril de 2019, cuando se entregó.
Sin embargo, el 15 de diciembre último, la familia de Guillermo recibió la notificación de que Bofill tenía la libertad condicional, pero aseguran que ya lo habían visto por la costanera correntina pasear junto a sus padres los primeros días de diciembre pasado.
"Dije que no iba a manifestar más mi dolor después de escuchar la sentencia y que esté en la cárcel, pero lo que hizo la Justicia fue una burla. Lo liberaron dos años después de estar preso. Sentimos tristeza, impotencia. Se burlaron de la familia, de los hijos de Guillermo", dijo a época Mariela Gallardo, viuda de Juani.
"Tantos años luchando para que se llegue a un juicio y una condena y después de darle sólo cuatro años por matar a un jefe de familia que volvía de trabajar, no tiene sentido su libertad condicional", reiteró.
"El primer papel que me llegó fue la nota del juzgado, el 15 de diciembre, firmada por la jueza Zacarías, diciendo que Rafael Bofill estaba con libertad condicional. Pero ya me habían comentado que lo vieron días antes paseando. Pasó las fiestas en familia y nosotros sin Guillermo", dijo la mujer, quien cuenta con el apoyo de la Asociación Civil Madres del Dolor.
Juaní era mozo y volvía de trabajar en su moto cuando en su camino encontró la muerte. Fue chocado por Rafael Bofill, quien salió ebrio de un boliche y guiaba un auto en 2013. Época
