La Policía del Chaco logró, tras 9 meses, atrapar a tres implicados en los delitos.
Efectivos de la División Homicidios y Capturas desarticularon una banda de supuestos estafadores que realizaba compras a nombre de otras personas, a través de créditos, y falsificaba documentos. Realizaron allanamientos en Resistencia y Puerto Tirol, donde incautaron recibos de sueldo y otras documentaciones. El grupo actuaba en todo el Nordeste y uno de los detenidos trabajaba en el Ministerio de Educación de la Provincia.
Nueve meses llevó a los investigadores policiales preparar el terreno que finalizó el jueves por la siesta cuando allanaron tres viviendas, dos viviendas en Resistencia y la otra en Puerto Tirol. Además de aprehender a los tres principales sospechosos que integrarían la banda, se encontraron con evidencia concreta: más de 50 recibos de sueldos, chapas patentes, título de propiedad y cédulas de motos, entre otros documentos.
El inicio
El primer dato concreto sobre la banda se obtuvo el 19 de enero de 2015. El Centro de Recepción de Denuncias había recibido un correo electrónico en la página web policial, de manera anónima, ya que es una de las modalidades que brinda el sistema. El mensaje era directo, hablaba de una banda de estafadores en el interior del Chaco y en otras provincias, pero solo había algunos datos sobre los sospechosos.
El expediente fue girado al Departamento Investigaciones Complejas y la División Homicidios y Capturas tomó el caso. En tanto, se sumó la División Investigaciones de San Martín, ya que las averiguaciones se extendieron a toda la provincia.
En San Martín, identificaron a dos hombres que podrían estar involucradas. Dialogaron con comerciantes de la zona, quienes dijeron que varias personas intentaron realizar operaciones como extraer dinero en efectivo en modo de créditos financieros, utilizando documentación de dudosa validez legal. Lejos de los rumores, la investigación se volvió tema central de los empleados policiales. El caso vería la luz, nueve meses después.
La banda
Durante los meses de investigación, los efectivos conectaron los eslabones y empezaron a atar los cabos para detectar el modo de operar de la banda. El supuesto cabecilla, que está detenido, realizaba la inteligencia previa y logística antes de cometer cada ilícito, además era quien realizaba las falsificaciones de las documentaciones necesarias. Además, prestaba su Citroën C3 para los traslados.
Otro integrante, que trabajaba en el área de Administración y Recursos Humanos del Ministerio de Educación de la Provincia, ocupaba un rol fundamental en la organización delictiva. Se encargaba de sustraer recibos de sueldos de los damnificados y proporcionarlos al cabecilla para realizar las documentaciones acorde al recibo.
Un tercer integrante reclutaba a otras personas que eran la cara visible de las operaciones, tanto de compra o extracción de dinero, también era el chofer que se encargaba de los traslados.
Los investigadores policiales dialogaron con dos ciudadanos que habían sido víctimas de estafas. A uno le habían realizado dos préstamos que ascendía a $40.000, en dos entidades crediticias con documentación a su nombre. Al otro damnificado le saltó una deuda en una casa comercial de la provincia de Corrientes.
La detención
Tras nueves meses de completar información, conocer movimientos y anticiparlos, los efectivos de la División Homicidios y Capturas decidieron allanar tres viviendas. Una en el barrio 9 de Julio de Puerto Tirol y las otras en Resistencia. El Juzgado de Garantías N° 3 otorgó las órdenes de allanamientos.
Junto con la Ayudante de Fiscal fueron hasta la vivienda Puerto Tirol, donde se encontraron con el supuesto cabecilla de la banda, quien inmediatamente fue aprehendido. El resultado de la pesquisa fue: incautaron 65 recibos de sueldos, 26 estampillas por el valor de un peso, de la provincia del Chaco; tres planillas discriminatoria de haberes del personal del Ministerio de Educación de la Provincia; tres declaraciones juradas sobre el origen lícito de los fondos y sobre la condición de persona expuesta políticamente, de la Dirección Nacional de Registros Nacionales de la Propiedad del Automotor y de Créditos Prendarios; siete Formularios “08”; cinco Constancias de inscripción de moto-vehículo; cinco títulos de propiedad del motovehiculo; cinco cédulas de identificación del moto-vehículo y cuatro chapa patente.
Además, había dieciocho celulares, la suma de $19.600, un boleto de compra-venta, cuatro declaraciones de equipaje y encomienda emitida por la Dirección General de Aduanas, una boleta de Sameep y tres licencias nacionales de conducir.
Por otro lado, también secuestraron un Citroën C3, 19 hojas impresas con parte del padrón electoral de la provincia de Corrientes, 73 tarjetas de material PVC blanco, sin estampar; tres documentos nacionales de identidad, facturas de diferentes comercios elementos de oficina por un monto total de $138.095, cuatro envases de tintas de diferentes colores, cuatro jeringas, elementos de oficina.
En las otras viviendas, donde detuvieron a los otros dos sospechosos, secuestraron 145 comprobantes de ejecución de anticipo de fondos y otros pagos extra presupuestarios del Ministerio de Educación Cultura Ciencia y Tecnología de la Provincia del Chaco; tres fotocopias de recibos de sueldos; cinco teléfonos celulares de diferentes marcas y modelo, una motocicleta Motomel Bit y una bicicleta mountan bike.
Finalmente, Los tres detenidos fueron trasladados hasta el Departamento Investigaciones Complejas, a cargo de la magistratura en turno.