La Unidad Fiscal que interviene frente a crímenes contra la humanidad en Chaco informó que personal de la Policía de Seguridad Aeroportuaria detuvo esta mañana en el interior de la provincia al ex agente de la policía local, Carlos Chávez, quien se encontraba prófugo desde hace diez meses, acusado del homicidio en 1979 del dirigente de las Ligas Agrarias Carlos Servando Píccoli.
El ex policía Carlos Chávez está acusado de haber participado en el homicidio de Carlos Servando Piccoli en abril de 1979. La detención se produjo durante procedimientos ordenados por la jueza Niremperger.
El ex policía, quien recibió asistencia médica inmediata debido a una enfermedad que padece, sería conducido a Resistencia ante la jueza federal Zunilda Niremperger entre mañana y el lunes próximo para brindar declaración indagatoria en la denominada causa de las "Ligas Agrarias", que cuenta en su objeto procesal con alrededor de diez víctimas de homicidios y desapariciones, y una treintena de sobrevivientes de privaciones ilegales de la libertad.
La localización del imputado se dio en el marco de una serie de allanamientos dispuestos por la jueza Niremperger, a pedido de la Unidad Fiscal que integran Patricio Sabadini, Carlos Amad y Diego Vigay.
Chávez está acusado del homicidio de Píccoli, quien de acuerdo a la investigación llevada a cabo por la Fiscalía fue asesinado el 22 de abril de 1979 en un camino vecinal conocido como cruce de Ramella, en el paraje Pampa Florida de la zona rural de la ciudad de Presidencia Roque Sáenz Peña. Piccoli conducía una bicicleta cuando fue emboscado por un retén policial integrado por dos agentes de la Dirección de Investigaciones de aquella ciudad, que portaban una ametralladora PAM 3 y un fusil FAL.
Cuando fue interceptado, el dirigente llevaba cuatro años ocultándose de las fuerzas armadas. Era buscado desde 1975 y desde entonces vivió exiliado en España. Regresó a Chacó en 1979 y comenzó a desarrollar una actividad de militancia social y gremial junto a Armando Molina, quien se encuentra desaparecido. Su tarea, por entonces, consistía en la visita, el diálogo y la entrega de volantes a pequeños productores agropecuarios, siempre en la clandestinidad. El objetivo era la reconstrucción del movimiento campesino.
El cuerpo de Píccoli fue exhumado en mayo pasado en el cementerio de Presidencia Roque Sáenz Peña y peritado por el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF). Durante el estudio, se halló en el cráneo de la víctima un orificio circular en el parietal derecho relacionado con la entrada de un proyectil y otro orificio en el posterior del parietal izquierdo compatible con la salida del disparo.
La Unidad Fiscal remarcó el resultado del peritaje como parte de la consolidación de su tesis sobre que Píccoli fue efectivamente asesinado y su muerte no se debió a un enfrentamiento armado con las fuerzas de seguridad, como fue presentado públicamente el hecho en aquél momento.
Para la Fiscalía el caso de Píccoli y el del dirigiente Eduardo Gómez Estigarribia (1977) -cuyo cuerpo también fue exhumado en mayo y peritado con similares conclusiones- se inscriben en "la sistemática de los fusilamientos presentados como supuestos enfrentamientos, como pudo reconstruirse en el debate oral y sentencia por la Masacre de Margarita Belén".
En la causa "Ligas Agrarias" se encuentran detenidos el oficial de inteligencia de Ejército Tadeo Betolli, el comisario general Eduardo Wischnivetzky, el oficial Jose Francisco Rodríguez Valiente y los agentes Miguel Antonio González y Alcides Roberto Safenraiter, todos de la Policía del Chaco, quienes fueron indagados y esperan que se resuelva su situación procesal.
