El fiscal que investiga la desaparición del financista Damián Stefanini -pareja de una conocida comparsera de Corrientes- ocurrida el 17 de octubre de 2014 en la localidad de Florida, decidió interrogar a 30 testigos, entre los que figuran familiares, amigos, socios, contadores y personas que hubieran tenido alguna relación comercial con el empresario.
Hasta el momento ninguno de esos testigos había declarado ante el fiscal federal de San Isidro, Fernando Domínguez. La mayoría de las personas vinculadas con Stefanini aportaron lo que sabían sobre el financista ante la fiscal Mariela Miozzo, que estuvo a cargo de la investigación en la primera etapa de la búsqueda.
Pero Miozzo, que se desempeña en el Ministerio Público bonaerense, dejó el expediente dos meses y medio después de la desaparición, cuando el caso comenzó a investigarse como un secuestro extorsivo, a partir de una llamada que recibió la familia de Stefanini en la que un hombre pedía dinero a cambio de revelar las identidades de los delincuentes que tenían secuestrado al financista. Según informó el diario porteño La Nación, ante la posibilidad de que Stefanini hubiera sido víctima de un secuestro, la fiscal pasó el sumario a la Justicia Federal de San Isidro, con más estructura para investigar estos delitos.