A pedido de la Policía, la Municipalidad clausuró el sábado El Patio Cultural, un espacio de la Biblioteca Mariño, por “aglomeración de personas”. Los representantes del lugar cuestionaron el accionar policial y se reunirán hoy con las autoridades comunales para revisar la situación.
En un comunicado, la institución aseguró que se cumplió con el protocolo sanitario y que no había motivos para la drástica decisión.
Durante la tarde de ayer, lograron coordinar una reunión con el secretario de Turismo, Cultura y Deportes del municipio, Juan Maldonado Yonna, que se realizará hoy a las 9.30. El funcionario es quien viene dialogando con el espacio para realizar las actividades de la forma más segura posible.
Los representantes de El Patio Cultural exigieron a distintos medios el derecho a réplica, tras la información difundida respecto de la clausura al establecimiento.
De acuerdo con lo indicado en el acta de comprobación emitida por la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable a la que accedió El Litoral, la clausura del centro cultural, ubicado en calle Santa Fe, se llevó a cabo en base a los dichos de efectivos de la Policía de Corrientes, que indicó que existió “aglomeración de personas”.
Pero hubo desinformación, ya que portales de noticias informaron sobre una “fiesta clandestina” en el lugar y también la demora de personas, afirmación que fue desmentida por los coordinadores del espacio cultural.
La actividad que se realizaba en el lugar “se encontraba habilitada en el horario permitido, y encuadrada en las últimas disposiciones sanitarias nacionales, provinciales y municipales”, indicaron en un comunicado oficial los coordinadores del Patio Cultural, por lo que calificaron a la clausura como “arbitraria”.
Detallaron que cerca de las 23:30, se presentó en el local un efectivo que, “sin mediar explicaciones, solicitó la suspensión de la actividad desarrollada en ese momento” y pidió refuerzos, por lo que se hicieron presentes varios móviles policiales y agentes de la Comuna.
Para cuando los operarios municipales llegaron al lugar, ya solo se encontraban los integrantes del grupo de trabajo que coordina el espacio cultural.
Las autoridades comunales, tras una inspección, constataron la existencia del registro QR, matafuegos y la documentación que respaldaba la legalidad de las actividades.
Pese a ello, se labró el acta por los datos de los primeros agentes que llegaron al lugar, pertenecientes a la Comisaría Cuarta. Se dejó asentado que hubo “aglomeración de personas” y que “se encontraban paradas y sin barbijos”.
Sin embargo, los coordinadores del lugar indicaron que los asistentes estaban cumpliendo con todas las medidas requeridas y ofrecieron registros fotográficos y audiovisuales en los que se podía verificarlo.
“Puntualmente, la actividad consistía en la disposición del espacio bajo la modalidad de bar literario con un set de música funcional”, indicaron los miembros del espacio y agregaron: “Al igual que todas las actividades organizadas, esta fue llevada adelante respetando todas las medidas de bioseguridad vigentes: uso de barbijo, distanciamiento social y provisión de alcohol en gel”.
El acta labrada, además, asentó que no se exhibió la habilitación comercial y que el espacio no contaba con elementos de seguridad, como matafuegos.
Al respecto, Maru Richeri, una de las coordinadoras del Patio Cultural, explicó a El Litoral: “La habilitación está en proceso porque la que nos dieron en pandemia venció en noviembre del 2020, pero tenemos un papel firmado por Maldonado Yonna que indica que ese documento está en proceso de acción”.
Además, la coordinadora indicó que sí poseen matafuegos y que todo el material probatorio será presentado en la reunión pactada para la mañana de hoy.
“En nuestro rol de promotores y promotoras culturales, es nuestra responsabilidad oficiar de ejemplo y hacer respetar las normas que tienen como objetivo cuidar a nuestra comunidad en el contexto de pandemia”, sentenciaron los representantes del centro cultural.