El estadounidense Zaevion Dobson, de 15 años, fue asesinado al proteger a tres chicas de los disparos de varios hombres en un ataque en Tennessee el viernes.
Otra mujer de 46 años, Lisa Perry, también recibió un disparo cuando estaba dentro de su apartamento, pero autoridades calculan que sobrevivirá.
El jefe de policía de Knoxville, David Rausch, explicó que el hijo de esa mujer herida, Brandon Perry se encontró con otros hombres y se dirigieron hacia el barrio donde vivía Dobson y "dispararon varias veces al azar". Allí, el joven muerto hizo de escudo humano para que las tres muchachas no sean lastimadas.
Luego se descubrió que el asesino Brandon Perry, de 23 años, recibió un disparo tras estrellar su auto. Murió de sus heridas el viernes por la mañana. Otros dos sujetos que huyeron del accidente fueron arrestados, aunque uno fue liberado más tarde tras ser interrogado.
"Estos actos de violencia cobardes y sin sentido deben cesar", dijo Rausch. Y agregó: "Deberíamos estar preparándonos para celebrar Navidad, pero ahora tenemos dos hombres muertos".
Rausch dijo que los investigadores creen que los tiroteos están relacionados con pandillas, pero él dijo que no parecía ser un motivo para apuntar contra Dobson. "Desafortunadamente, ellos escogieron un grupo aleatorio de hombres y mujeres que simplemente estaban pasando el tiempo", dijo.
Zach Dobson, hermano del futbolista muerto, dijo a la cadena WBIR-TV que estaba junto al grupo atacado cuando vieron a los hombres caminar hacia ellos. "¿Por qué disparar a los transeúntes al azar por nada? Estábamos sentados en un porche descansando", dijo.
"Zae era un chico maravilloso, un hermano impresionante. Sólo sé que lo echo de menos. Echo de menos a mi hermano", agregó.
Dobson era un estudiante de segundo año en Fulton High School, en el norte de Knoxville. Rob Black, el entrenador de su equipo de fútbol, definió a Dobson como "un gran muchacho".