Juana Zamudio tiene 85 años. El miércoles se prendió fuego su casa y por el hecho su hermana Antonia falleció asfixiada. Vecinos de la zona organizan una colecta pero ella asegura que con una cama y un colchón alcanza.
El pasado miércoles, Antonia Zamudio de 87 años, murió luego del incendio de su precaria vivienda del barrio Sur. Su hermana Juana, de 85, vivía con ella y hoy se encuentra en un estado de necesidad extrema. Época dialogó con la sobreviviente y contó su historia de unión familiar.
La tragedia se registró en la esquina de Lavalle y Mendoza. De acuerdo a los datos oficiales, el hecho ocurrió alrededor de las 17. La vivienda era habitada por las dos ancianas y en el momento del inicio del fuego ambas se encontraban en una habitación.
Antonia sufría una enfermedad que no le permitía moverse de la cama. Al desatarse el foco ígneo, su hermana abrió la puerta y salió a pedir auxilio, lamentablemente la abuela que quedó en la pieza no pudo resistir el avance de las llamas y el humo.
Los vecinos de la zona rescataron a Juana quien, pese al susto y la lesión por un golpe provocado en la vía pública, pudo salvar su vida. El fuego ganó gran parte del extenso terreno y los vecinos de la zona con baldes de agua intentaron apagar las primeras llamas.
En el lugar se presentaron dos dotaciones de bomberos para extinguir el fuego. Además de los curiosos, personal de la Dirección de Tránsito de la Municipalidad de Corrientes colaboró con el corte del tráfico. Minutos más tarde se acercó personal de la Dirección de Emergencias Sanitarias de la Provincia - más conocido como 107 -, para asistir a las abuelas.
Lamentablemente cuando llegaron, una de ellas ya estaba sin vida. Los facultativos informaron que Antonia murió por asfixia causada por el monóxido de carbono del humo.
“Los hermanos sean unidos porque esa es la ley primera”. Esta frase del Martín Fierro, tanto Antonia como Juana, pusieron en práctica toda la vida. Desde que nacieron vieron pasar los años en la finca de la tragedia. Este medio visitó a la abuela que sobrevivió de las llamas y comentó el difícil momento que le tocó vivir.
Antes de avanzar con el relato de lo ocurrido, dedicó unos minutos para recordar su historia familiar. Dijo que el terreno que habitan es producto de la herencia de sus padres. “Mi papá se llamaba Aparicio Zamudio. Él falleció el 20 de agosto de 1963 y mi mamá se llamaba Sebastiana Castillo, quien nació en 1907 y falleció a los 92 años. Acá nos criamos y vimos pasar el tiempo. Tanto mi hermana como yo no tuvimos hijos y éramos felices en la vida que llevábamos. Sabíamos que vivíamos en condiciones precarias ya que sufrimos las consecuencias de las lluvias y el frío, pese a todo esto le pusimos el pecho a la vida”, dijo Juana, acompañada de Blanca, la única hermana que le queda.
Ambas recordaron a Antonia como una mujer de lucha, aunque en el último tiempo se encontraba postrada por una infección en una de sus piernas. El caso conmovió a la comunidad. La vivienda es inhabitable, por tal motivo algunas personas a través de la red social Facebook realizan una campaña para entregales donaciones. La Dirección de Emergencias Sanitarias hoy entregará colchones y alimentos.