El hecho ocurrió el pasado 12 de agosto en la comisaría del PRIAR en Alvear. El subalterno denunció maltratos y hasta un disparo “accidental” por parte del segundo jefe de dicha dependencia. Ambos siguen conviviendo en la unidad de la policía rural e islas.
El pasado 12 de agosto en las primeras horas de la tarde un cabo de la policía provincial denunció a su jefe, un subcomisario de la una unidad dependiente del PRIAR (Policía Rural e Islas) en Alvear.
En la presentación del joven suboficial se describen malos tratos, violencia física, psicológica y hasta un disparo “accidental” por parte del subcomisario dentro de la dependencia policial.
Las lesiones denunciadas habrían sido constatadas y todo quedó asentado en la denuncia formal hecha por el Cabo. Otros subalternos del subcomisario en cuestión, abonaron y acreditaron los dichos de su compañero.
Lo más extraño es que pasados varios días del episodio, todos los involucrados: denunciado y denunciante, siguen conviviendo en la misma dependencia policial.
Hace un mes, el pasado 18 de julio, cuando se removió a la cúpula policial de la provincia el gobernador prometió que la dirección de asuntos internos iba a depender directamente del Ministerio de Seguridad de la provincia, al menos en este hecho relatado, hasta ahora no hubo intervención.