Ante el peligro que supone para los policías que prestan servicio en la Comisaría 2ª, decidieron realizar una colecta para una protección especial en una de las patrullas. La iniciativa expone falencias en el equipamiento de los agentes pese al discurso y los anuncios oficiales.
Con el objeto de no tener ningún impedimento para ingresar en estos sectores violentos, la totalidad de quienes prestan servicio aportó sus ingresos para que se pudiera construir y colocar en el móvil 168 esta defensa adicional, afirma una nota publicada en el sitio Policías Trabajando.
Con el dinero recaudado, los efectivos compraron rejas metálicas con las que cubrieron el parabrisas, las ventanillas laterales y la luneta. Son los lugares más débiles y atacados en los incidentes, señala el texto.
La situación expone la falta de insumos para la correcta realización de la labor policial en zonas que la propia institución denomina críticas. El argumento fue que en la jurisdicción de la mencionada seccional hay asentamientos ilegales, que generalmente son los más conflictivos, por lo que eso suma un peligro más a los que ya se exponen diariamente los uniformados.
Según el portal -que publica procedimientos de la fuerza en el ámbito de la Capital con datos proporcionados por los propios agentes- son muchos los barrios en los que vecinos no dudan en atacar a los policías arrojándoles cualquier tipo de elementos ni bien ven llegar un móvil.
Durante este año la División Infantería de la Policía debió colaborar en los operativos realizados por esta seccional y también por otra cercana, la 12ª.s