Cuando Santi y su familia se aprestaban a participar de un festival solidario para comprar una nueva silla de ruedas, malvivientes se alzaron con la mochila de pibe discapacitado.
Lo que iba a ser un día de celebración en el que una familia iba a juntar fondos para que Santiago Luna, de 24 años, quien padece una grave afección medular, tuviera una mejor calidad de vida, se convirtió en un calvario. Instantes antes de partir de su vivienda de Quilmes, marginales les robaron una mochila de oxígeno, imprescindible para que el muchacho pueda salir de su casa.
Por eso, necesitan de la solidaridad de todos para superar este duro trance. “Saqué la silla especial a motor, que pesa toneladas, a un patio de la casa y la mochila de oxígeno estaba colgada, pero cuando la fui a buscar, la mochila ya no estaba. No entiendo qué pasó”, resumió el robo la madre de Santiago, Julieta Torres, ante “Crónica”, notoriamente angustiada.
Es que ese artículo es esencial para que su hijo pueda salir de su casa, ya que “necesita oxígeno las 24 horas”. El robo ocurrió en plenos preparativos para ir desde su casa del barrio Los Cedros a la sede quilmeña de ATE, donde se realizó un encuentro solidario para recaudar fondos para adquirir una nueva silla de ruedas.
Por eso, la jornada que comenzó repleta de ilusión y esperanza terminó envuelta en una tristeza difícil de superar.
Imposible de comprar
Mientras intentaba sacudirse la bronca, Torres aseguró que para su familia es “imposible” adquirir una nueva mochila de oxígeno. “Está más de 10.000 pesos, no podemos comprarla”, dijo, a la vez que agregó que no sabe “si IOMA la va a reconocer”. Es que la obra social de la provincia de Buenos Aires fue la que les había otorgado la mochila cuando aceptó costear la “internación domiciliaria”, por lo que ahora temen que no quieran reponerla.
Una salud frágil
El estado de Santiago no es sencillo, por lo que los médicos afirmaron que “necesita oxígeno las 24 horas porque se ahoga”. Por eso, ni siquiera “puede salir a la calle sin llevar el oxígeno” y para eso tenía la mochila. “Él recién ahora está cayendo en lo que pasó y me empezó a decir que no va a poder salir de la casa porque le va a pasar algo”, lamentó su mamá, quien reconoce que lo sucedido les “duele en el alma”.
Ante esta difícil situación, su familia necesita de la solidaridad de todos, por lo que quienes puedan brindarles una ayuda pueden comunicarse con Julieta Torres a los teléfonos 1523621255 y 4200- 1665. Santi se los va a agradecer.