La víctima fue identificada como Romina Aguilar y era la esposa del intendente de la localidad puntana de La Calera. De acuerdo con las primeras informaciones, la mujer fue atacada momentos después de que salió de su casa en la capital provincial.
Al parecer, la asesinaron de dos tiros mientras cerraba el portón de la vivienda y luego de sacar su camioneta para viajar con destino a la escuela de La Calera donde era alumna del Plan PIE (Plan de Inclusión Educativa). Los vecinos escucharon los disparos y dieron aviso a la policía y al propio intendente, quien aún permanecía dentro de la casa.
Medios locales sostienen que los atacantes no la asaltaron y incluso arrastraron el cuerpo algunos metros, lo que desterraría por completo la hipótesis de un robo. Sin embargo, aún no hay confirmación oficial. Aseguraron que fueron dos los asesinos y que huyeron del lugar en una moto.
La policía aun trabaja en el lugar y en la causa interviene la jueza Virgina Palacios. En dialogo con el diario San Luis Informa, el propio intendente Diego Lorenzetti confirmó que se trató de un crimen por encargo. "Me mandaron a matar a mi mujer ¿Cómo le explico a mis hijos?", lamentó el jefe municipal. La mujer fue asesinada en el barrio Faecap, ubicado en las inmediaciones de la ruta 147, que lleva justamente desde la capital de la provincia a La Calera.
Oriundo de Santa Fe, Lorenzetti se radicó en esa localidad hace unos diez años cuando vino a trabajar para una importante empresa cementera del lugar. A partir de su crecimiento económico, decidió a abrir su propio negocio hasta que tomó la decisión de incursionar en política. Debido a su popularidad en la pequeña localidad puntana, el hombre llegó a la intendencia bajo el ala del partido de los hermanos Adolfo y Alberto Rodriguez Saá. La pareja tenía un hijo que al momento del crimen estaba en La Calera.